Fuente: IProfesional ~ Se busca reducir los ruidos que molestan a los vecinos, quienes llevaron su reclamo a Fein. Los empresarios del rubro, reticentes a la propuesta
El municipio propondrá a los dueños de bares y cervecerías de Pichincha que limiten al mínimo posible la cantidad de clientes que consumen bebidas y comida en las calles, en la puerta de sus locales. De esta forma, el Ejecutivo busca reducir los ruidos molestos que padecen los vecinos de la zona, quienes el jueves llevaron esa queja a la propia intendenta Mónica Fein. Los empresarios del rubro se mostraron reticentes a implementar esta restricción.
El planteo fue formulado por el secretario de Control y Convivencia Ciudadana, Guillermo Turrin. «Vamos a tratar de consensuar con los empresarios que haya la menor cantidad de gente posible en las calles ya que el ruido que molesta a los vecinos no se genera adentro, donde por lo general tienen tratamiento acústico», comentó.
En declaraciones a La Ocho, el funcionario aclaró que en la actualidad ninguna norma impide que los clientes consuman en mesas, sillas y hasta parados, afuera de los bares como ocurre en muchas cuadras de Pichincha.
Al no existir por ahora esa prohibición, el municipio apuesta a consensuar con los empresarios del barrio una serie de medidas que reduzcan la conflictividad en el corto plazo.
«En los próximos días los vamos a convocar a dialogar como hicimos con los vecinos para tratar de buscar un equilibrio entre el fomento a la actividad económica, la diversión de los jóvenes y el derecho de los vecinos a descansar», anticipó Turrin.
El titular de la Secretaría de Control y Convivencia resaltó que ya en las últimas semanas «se dispuso un refuerzo en los operativos de control en las manzanas de Pichincha que tienen fuerte actividad gastronómica».
Según Turrin, los operativos se realizan «de lunes a lunes por la noche, ya que hay movimiento de clientes prácticamente todos los días» con unos diez agentes por jornada.
Consultado sobre esta sugerencia de la Intendencia, el presidente de la Asociación Mercado Pichincha, Reinaldo Bacigalupo, confió que ya tuvieron » varias reuniones con la Municipalidad. Compartimos muchas preocupaciones de los vecinos como el tránsito y los cuidacoches».
Luego advirtió que «hay problemas que son puntuales de cada negocio, algunos están desbordados, pero son casos aislados. Estamos de acuerdo en tener todo ordenado, de hecho en el último mes se notaron muchos más controles de la GUM y otras dependencias, y eso nos beneficia a todos».
Para Bacigalupo, «es una tendencia mundial que la gente salga a tomar una cerveza afuera. Tampoco creemos que se los deba encerrar cuando lo más lindo de Rosario son sus calles, sus veredas, sus árboles».
El empresario remarcó que «se puede estar en la calle permitiendo el paso, el metro y medio para los peatones; tampoco podemos evitar que se converse en la calle tomando algo. Es complicado, pero hay que buscarle una solución».
Y recalcó que en el sector son 42 bares y cervecerías que emplean «de manera directa a dos mil personas y otras mil de manera indirecta, en un contexto económico muy complicado para toda la región» con recesión, caída de empleo, inflación y tarifazos.