Cuánto cuesta comer en la Exposición Rural y cuáles son las alternativas

Fuente: La Nación – Una vez más, las hamburguesas, choripanes, empanadas y los tradicionales cortes de carne forman parte de las opciones disponibles en la muestra.

Las filas que se forman en los food trucks marcan los horarios de comidas en la Exposición Rural de Palermo. Cerca del mediodía, los aromas de los platos comienzan a despertar el feroz apetito de los que recorren de punta a punta la muestra. Las ofertas para comer dentro de la exposición son variadas y van desde los típicos carritos de panchos y hamburguesas hasta la propuesta más exclusiva que hay dentro del corredor interno.

Las sugerencias para comer este año también se han ampliado con aquellos comerciantes que han decidido darle un valor agregado a su establecimiento. Por ejemplo, Matías Nahuel López, conocido como El Tute de Lanús, llegó por primera vez al patio cervecero de la Rural con sus productos. En 2020, el expositor ganó el Gran Premio de la Cocina. Contó que este es el primer año que viene a una exposición rural: “Generalmente, estamos en Caminos y Sabores”. El productor tiene propuestas de sándwiches de la raza Limousin: “Estamos trabajando en otras exposiciones y ahora queremos apostar a la feria ganadera”. Junto a Juan, uno de los socios, son uno de los productores de la raza. En el otro extremo, señaló, también está el local de Christian Petersen, quien fue uno de los jurados del programa que lo llevó a la gloria.

Hay diversas opciones para comer
Hay diversas opciones para comerHernán Zenteno

En un breve recorrido que hizo LA NACION se pudieron recopilar algunos datos clave para saber cuánta plata hay que llevar en el bolsillo para sentarse a almorzar o picar algo. Los menús son variados y los atractivos van desde degustar un cono de fritas clásicas o aquellas que vienen con salsas y toppings,hasta sentarse con más tiempo en el restaurante Central, El Fogón o los patios internos bajo resguardo.

 Matías Nahuel López, conocido como El Tute de Lanús, mientras atiende a los clientes
Matías Nahuel López, conocido como El Tute de Lanús, mientras atiende a los clientes LA NACION

El sándwich asado con cuero está a $9500 en Limousin grill, en tanto y por el mismo valor también está la burger roast beef, con panceta, tybo, carré, aderezo. Le sigue también un sándwich braseado con aderezo por el mismo precio. El chorizo ahumado con cáscara de nuez pecán está en $6500. Así también el asado de cuero madurado en $8909. Todos los productos son de la raza Limousin, pagando en efectivo se aplica un descuento importante.

En otro food truck una hamburguesa roza los $6200. El mismo producto con queso tybo $8100. La hamburguesa completa llega a los $9500. El churrasquito con queso tybo $8700, el churrasquito completo $9900. El combo de papas fritas $3900, mientras que el superpancho $4100. Las bebidas están entre los $3000 y $4700. Las medialunas para merendar están en $1500 mientras que las medialunas rellenas en $3000. En tanto, el roll de canela $4500 y el classic $7000. El wrap de bondiola $8000. Los express doble $3000 y el submarino $2500, el te $2000. El agua y las gaseosas $2900. La cerveza también ronda los $4300 y $4700.

Los food trucks de la Rural
Los food trucks de la RuralLA NACION

El combo de dos superpanchos más dos bebidas $13.700. En los Super Panchos, el hotdog con salchicha alemana, el estilo newyorkino, mexicano y americano cuestan $5200.

Para quienes quieren sentarse en una mesa al resguardo de las bajas temperaturas, también hay propuestas de los restaurantes internos. En La Pulpería y en Niágara, los cortes van desde un bife de chorizo por $24.500 hasta el asado criollo por $28.800, el vacío por $26.000. La entrada, que consiste en una empanada criolla por $2400 y el chorizo puro de cerdo por $3900. Las guarniciones están en $6800, mientras que las minutas $15.500. Los postres están en $5900.

La gastronomía, otro punto fuerte de la exposición
La gastronomía, otro punto fuerte de la exposiciónHernán Zenteno

Una alternativa para aprovechar los días bajo el sol, Los Fuegos, que asa la carne a la intemperie y tiene bifes de chorizo a la criolla por $12.000. La parrillera a la provoleta por $12.000, bondiola braseada a la barbacoa por $12.000 y el chorizo ahumado por $8500. El cono de papas chico por $5500, mientras que el grande $9000.

Los food trucks son las alternativas más accesibles de la Rural
Los food trucks son las alternativas más accesibles de la Rural LA NACION

En uno de los últimos food trucks que se sumaron este año, el choripán cuesta $5500, mientras que el sándwich de bife de chorizo de pan y carne $9500.

El Restaurante Central ofrece un menú A, B y C, cada uno con entrada o postre, un plato principal, guarnición y bebidas sin alcohol. El menú A tiene un costo de $45.000. El menú B consta de una entrada a elección, un plato principal, guarnición, postre y bebidas preseleccionadas, por $70.000. En tanto, el menú C incluye una selección de entradas generosa, al igual que los platos principales, guarnición y postres a elección, similar a las bebidas por $100.000.

La gente mientras hacía fila para comprar un sándwich
La gente mientras hacía fila para comprar un sándwichLA NACION

La cocina de los chefs: qué tienen y qué preparan en su casa los cocineros más famosos

Fuente: Clarín – Los miramos en la TV, cocinando en sets impolutos donde todo está organizado. O en el día a día están en el fragor de la cocina de un restaurante, donde también todo está organizado, pero de otra manera: con elementos súper profesionales que facilitan las tareas. También los scroleamos en Instagram, en un modo más influencer. Pero, ¿cómo son los chefs cuando no los vemos? ¿Cómo cocinan en sus casas? ¿Qué ingredientes tienen en sus alacenas y cuáles son sus utensilios favoritos?

Para responder esas preguntas, Clarín golpeó la puerta de tres reconocidos cocineros. La abrieron y abrieron además, sin pre producción, las de sus armarios. Abrieron la puerta de la heladera y la del horno para derribar un mito: sí, también los chefs más importantes guardan cosas adentro.

En sus cocinas conviven artefactos profesionales con elementos que se consiguen en cualquier bazar. Del mismo modo que en sus alacenas hay alimentos que compran en el super junto con tesoros de sus viajes.

En casa, se encuentran con los mismos dilemas a la hora de planificar la comida de la familia. Pero coinciden en ese espacio de encuentro y de amor que se genera alrededor de la cocina.

Aquí, una invitación a entrar a las cocinas de Narda Lepes, Christian Petersen y Juan Gaffuri, y a tomar nota de sus consejos para cocinar en la nuestra.

Narda Lepes, la coleccionista

Aunque ella no se define como tal, Narda Lepes es una coleccionista. Y como todo coleccionista, cuando se la invita a mostrar su colección explota su pasión. Minuciosa, didáctica, detallista, Narda literalmente no deja cajón sin abrir de la cocina de su departamento de Belgrano. Y en cada pieza que saca y muestra para Clarín da una lección de cocina, que se mezcla con viajes, amigos y anécdotas.

La cocina ocupa un lugar importante en la casa de Lepes, integrada en un ambiente donde se equilibra con su amplia biblioteca. Narda tiene en mente una remodelación para hacerla más funcional, porque pasan mucho tiempo en ella.Narda Lepes en su cocina. Foto: Rafael Mario Quinteros Narda Lepes en su cocina. Foto: Rafael Mario Quinteros

–¿Tenés idea cuántos utensilios tenés?

–No hay forma de contarlos. Es un número móvil todo el tiempo. Porque regalo, compro, aparecen, pierdo, reaparecen…

Arranca el tour en la heladera, con muchos imanes. Al lado, el espacio con las cosas de uso diario: vasos surtidos, la taza que su marido se resiste a tirar, platos que le regaló Lele Cristóbal, platos que compró en el supermercado, platos que compró en Perú, los platitos de metal de las tazas Pyrex de su abuela…

Del otro lado, los morteros. Usa mixer eléctrico, pero prefiere estos. Aquí empieza a dar rienda suelta a su entusiasmo. “Este es muy lindo, pero de pinta: es farmacéutico, me lo regalaron y no sirve para cocinar. Este es coreano y es excepcional, es de cerámica: tiene unas canaletas y muele en un segundo, no es para hacer pastas demasiado finas pero es muy rápido, lo uso para sésamo. Este me lo traje de México y hace fino, fino, lo uso para pastas que tienen que ser una crema”, describe.Platos en uno de los estantes de la cocina de Narda. Foto: Rafael Mario Quinteros Platos en uno de los estantes de la cocina de Narda. Foto: Rafael Mario Quinteros

Los cajones de su mesada son amplios: se entiende por qué. Al abrir el primero, se descubre un mundo. Empieza a sacar utensilios y a contar historias y utilidades de cada uno. Hay varios que son, simplemente, sorprendentes:

  • Una caja de acero con seis cajitas adentro para guardar especias
  • Un set de fuentes para tempura: de un lado se pone el harina y del otro se escurre el aceite
  • Un grill plegable para que caiga la grasa del pollo al horno y quede dorado
  • Una pastilla de terracota para calentar la panera
  • Una mini mandolina japonesa para cortar ajo y otra de madera del mercado de Eslovenia con un sistema especial para cortar las láminas sin lastimarse los dedos
  • Un molde de madera para darle forma tramada a la manteca
  • Un aparato para sacarle la pepita a la cereza
  • Una espátula para rallar jengibre
  • Una cucharita japonesa de metal para comer helado que mantiene la temperatura
  • Una sartén también japonesa a la que se le gira la tapa para que entre aire y que, afirma, “te hace el mejor huevo de la humanidad”
  • Pinceles y espátulas que compró con Donato de Santis en Italia… en una ferretería, porque son de pintor
  • Telas con cera de abeja para reemplazar el film plástico que hace ella misma con Leia, su hija adolescente (“Derretís cera de abeja a Baño María, metés el paño de algodón limpio apenas húmedo en la cera, lo escurrís, lo secás sobre papel manteca o silicona, le ponés otro papel, planchás para distribuir y lo dejás secar”).

Utensilios a mano, en la cocina de Lepes. Foto: Rafael Mario Quinteros Utensilios a mano, en la cocina de Lepes. Foto: Rafael Mario Quinteros

Narda cocina mucho con Leia. Muestra una sartén japonesa que aún no estrenó para cocinar el huevo, el caldo y todo lo que se coloca sobre el oyakodon, el bowl de arroz. También otra sartén que compró acá en un local de sábanas y acolchados en el barrio coreano, que tiene un bazar oculto: se usa para hacer unas tortillitas de arroz crocante.

Con Leia, hacen cada tanto una noche de competencia de picante. En su alacena hay muchas salsas picantes. Hay muchos condimentos, aceites, mieles, vinagres… Lepes cuenta cómo la tiene organizada: en los estantes con las cosas que tiene a mano, hay de todo pero en poca cantidad, porque a esa pared le da el sol. El stock lo tiene guardado en el lavadero, donde conviven el arbolito de Navidad con la máquina de pastas y un bolso tipo campamento con sus cuchillos de viaje.

Los cuchillos, para un cocinero, son fundamentales. Narda tiene montones. Muestra un set de Victorinox que lleva cuando viaja a cocinar: de mango amarillo y no negro, se minimiza el riesgo de que alguien se quede con uno por error. También abre por primera vez una enorme cuchilla oriental para verduras. Y saca con cuidado de otra cajita uno que compró a los 29 años, en el primero de sus tres viajes a Japón, en el mercado del pescado: “Tiene un tamaño muy amigable a mi mano. Es el que más me gusta”.

Lepes tiene una cocina profesional. Concede que para muchos es un sueño tener una de esas, pero advierte que están pensadas para cocinar en un restaurante y no en una casa (“A menos que tengas una familia de ocho, no vayas por ahí”). Lo descubrió tarde, y por eso abre la puerta del horno y saca los difusores que pone sobre las hornallas para reducir el calor. Del horno también saca una espectacular fuente/olla de hierro forjado, que pesa 4,5 kilos: “Podés hacer cualquier cosa ahí, desde mantener algo caliente hasta un bife con salsa y que no salpique”.Condimentos. Deja en un estante los de uso cotidiano y el stock en la alacena del lavadero. Foto Rafael Mario Quinteros Condimentos. Deja en un estante los de uso cotidiano y el stock en la alacena del lavadero. Foto Rafael Mario Quinteros

¿Tiene una casa llena de ollas y sartenes? Menos de las que se podría imaginar. En el horno guarda varias sartenes Darto y en un estante alto hay cacerolas, pero la que más ama es una grande roja que tiene siempre sobre la cocina. Tiene una historia particular. Es un prototipo que desarrolló una marca con la que trabajaban en el canal El Gourmet: como la original era muy pesada, pensó con la empresa el diseño y con sus ajustes lograron bajarle un 30% el peso. En ese color rojo nunca más se hizo así que Narda se quedó con un olla única.

Para revolver en ella, su set preferido incluye las cucharas de madera que compró en un viaje a Marruecos a sus 21 años. Sobre un lado están más gastadas porque es el que golpetea sobre la olla. Y también algunas de siliconas “no desprenden porquerías. El plástico desprende plásticos”.Si Narda eligiera un solo ingrediente, sería el vinagre. Foto Rafael Mario Quinteros Si Narda eligiera un solo ingrediente, sería el vinagre. Foto Rafael Mario Quinteros

¿Y qué magia revuelve con esas cucharas? Al repasar sus ingredientes favoritos, muestra latas de conserva de pescados que trajo de afuera (“De mis viajes siempre me traigo algo. En la Aduana me miran y me dicen, ‘¿Qué es esto?’ Un cucharón de coco. ¿Ocho?'»), frascos de mermelada y los higos en conserva que hizo el año pasado. La lista sigue: comino de Catamarca, pimienta aromática japonesa, especias para shawarma, canela vietnamita, cacao de Francia, una miel que compró en Yemen con la pastelera Pamela Villar, un polvo de limón hecho por Francis Mallmann, una sal con una textura sorprendente que le regaló Mauro Colagreco, los tomates en conserva de Finca Isis, las aguas de hongos que produce su amigo Niki Drucaroff… imposible enumerar todo.

El kit básico para equipar una cocina por Narda

  • Un cuchillo de pan, para cortar también budines y tortas
  • Un cuchillo “del rango de precio que puedas pagar que te resulte cómodo para tu mano”
  • Un cuchillo serrucho de buena calidad
  • Un cucharón en una medida normal («El del juego de tu abuela»)
  • Un batidor «que no junte mugre»
  • Una buena cuchara de madera plana porque permite despegar lo del fondo («En los bazares orientales hay porque se usan para el wok»)
  • Un rallador bueno común (no el del supermercado). Del lado grueso se ralla lo que se va a cocinar; del lado fino, lo que se come crudo (como zanahoria); el lado del queso para rallarlo finito y que queden partículas de sabor; el de las láminas reemplaza a una mandolina
  • Una fuente de horno plana “sin huevadas ni relieves” para hacer bizcocho, galletitas o verduras sin líquido
  • Una fuente de horno gruesa donde entren dos porciones de algo o que tenga líquido
  • Una cacerola para salsa, chica
  • Una sartén buena, puede ser de hierro: “Las negras, humildes, que venden en los lugares de parrillas y cosas de campo. Hay que lavarla, guardarla con un poquito de aceite, y usarla mucho”
  • Una cacerola para hacer pasta: si tiene fondo grueso, mejor

Junto a la cocina, en la estación de lavado, unos platos de bambú que usa para lavar y escurrir vegetales. Al otro lado, la sal –guardada en un enorme salero de cerámica copiado de un modelo antiguo francés que se hizo a la medida de su mano–, aceites y su ingrediente imprescindible: vinagre.

Terminando el tour, Narda nos lleva al living. Allí tiene una colección de piezas vintage de Pyrex, con las que se fanatizó y usa para todo, manteles, individuales, delantales –el modelo que más le gusta es el que ella diseñó con la diseñadora Romina Savastano, con las tiras finitas y bolsillo hacia atrás– y los posafuentes que crearon con un grupo de mujeres artesanas del Iberá para su restaurante Kona. Pasaron dos horas y no quedó rincón de la colección por escudriñar. Por ahora, porque, como todo coleccionista, la apasionada Narda siempre está a la búsqueda de un nuevo utensilio, un nuevo ingrediente, un nuevo detalle para sumar.

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Narda Lepes nos muestra su cocina y nos comparte algunos consejos. Qué utencillos y elementos no pueden faltar en tu casa al momento de cocinar.

Las milanesas de Christian Petersen

En el loft de Christian Petersen en San Isidro, la cocina es literalmente el corazón de la casa. Cuando se traspasa la puerta de este departamento en la planta baja de un vieja fábrica reciclada, no se entra ni a un living ni a un distribuidor: se entra a la cocina. Es que para esta familia ensamblada que componen el chef con su pareja Sofía Zelaschi y los hijos de ambos, en ese ambiente no sólo se cocina sino que también se come y es, en definitiva, su punto de reunión.Christian Petersen en su cocina, un orgullo del chef. Foto Rafael Mario Quinteros Christian Petersen en su cocina, un orgullo del chef. Foto Rafael Mario Quinteros

Más allá, junto a los ventanales, está el comedor con una mesa enorme. Más allá, el estar con la TV. Y en el medio, un gimnasio completo. En los espacios se intuye la dinámica de esta familia, que los dueños de casa expondrán luego en la charla.

Christian tiene tres hijos (Hans, de 24; Lars, de 20; y Francis, de 17) y Sofía, uno (Lolo, de 8). Los hijos del cocinero viven en departamentos separados, pero aquí se encuentran, en esta especie de lobby, y comparten los otros espacios como el gimnasio y la televisión comunitaria. “Es como un hotel con room service: la cocina está abierta siempre”, coincide la pareja.

Y sigue el cocinero: “Como verás, es una cocina diferente. Está armada entre restauranteur, familia, muchos hijos. Entre comer sano y no comer sano, entre cocinar y no cocinar. Estoy orgulloso de ella porque no hay una parecida”.

La cocina de Petersen es una de esas de revista de decoración. Los muebles los diseñó el reconocido arquitecto Alejandro Sticotti. En el medio hay una isla/barra donde suelen comer. Y está organizada por estaciones, porque se pensó casi con la lógica de la cocina de un restaurante. Con esa misma lógica, la pareja organiza sus compras semanales: todos los lunes, Sofía hace el stock y repone lo que falta.Los cuchillos. Petersen dice que los cocineros coleccionan muchos, pero usan sólo uno. Foto Rafael Mario Quinteros Los cuchillos. Petersen dice que los cocineros coleccionan muchos, pero usan sólo uno. Foto Rafael Mario Quinteros

Sofía y Christian van guiando al equipo de Clarín por esas estaciones. La primera, es la alacena, donde tienen lo que más usan. Detrás de dos puertas enormes, un orden que envidiaría Marie Kondo. Al enumerar ingredientes, el chef va mostrando cómo es la dieta diaria de la familia: alimentos simples, saludables, de calidad, con la mínima intervención. “Cocino mucho en mis restaurantes, acá cocina más Sofía”, concede él.

Hay enlatados (atún, tomate y arvejas), azúcar orgánica, cookies de su panadería La Valiente, granola, pastas y harinas alternativas, además de aceite de oliva que se trae por bidón del restaurante y es de un productor mendocino que conoció grabando para El Gourmet y diez años después fue elegido el mejor del mundo. También hay conservas: “Me gustan mucho, te salvan: uno conserva alimentos en la estación y los guarda para cuando no están en la estación”.

Y está la colección de mieles de Sofía: hay de España, Portugal, Francia, y de distintos puntos de la Argentina: “Tenemos más de 30. Es impresionante como la miel, según su origen, es el sabor diferente que tiene”. La usan para comer. “Pan, queso y miel: para mí, es el manjar de los dioses”, define.La alacena, donde hay muchos productos saludables y conservas. Foto Rafael Mario Quinteros La alacena, donde hay muchos productos saludables y conservas. Foto Rafael Mario Quinteros

Christian dice que él con eso es feliz. Pero son varias las bocas que aquí se alimentan y entonces, hay que tener diversidad. Abre una puerta de la heladera y hay frutas de estación, huevos encurtidos, yogures para el pequeño Lolo, un poco de dulce de leche, vegetales y kombuchas: dejaron de consumir gaseosas.

Abre la otra, y está el stock de congelados: las milanesas de P Milas y las pizzas y empanadas de Pizza Zen, de su hermano Roberto. “Como verán, es toda comida de los Petersen. Pasó en pandemia, nosotros siempre quisimos lograr que nuestra cocina llegar a las cocinas de las familias. Tenemos dos emprendimientos los dos hermanos, las pizzas orgánicas amasadas a mano y las milas que hacemos nosotros con mi equipo. Nada reemplaza la comida de tu casa, pero una buena milanesa de los Petersen te puede ayudar”, sonríe.

En el freezer hay también bolsas de bananas congeladas. “Igual que en un restaurante y que para cualquier familia, está todo carísimo. Tratamos de que algo se está por echar a perder, lo congelamos”, explica.Christian y Sofía. La pareja gestiona su hogar con la misma lógica de un restaurante. Foto Rafael Mario Quinteros Christian y Sofía. La pareja gestiona su hogar con la misma lógica de un restaurante. Foto Rafael Mario Quinteros

La sustentabilidad está incorporada de una manera orgánica al día a día. Hay pocos aparatos eléctricos: la amasadora (la máquina de pastas es la famosa manual), la pava eléctrica, la tostadora y la arrocera.

“Está prohibido prohibir, pero está prohibido el microondas y el lavavajillas”, plantea. Le gusta lavar a mano y, siguiendo la lógica de restaurante, hay una bacha gigante. “Acá podés estar tres días sin lavar que no hay problema; y al tercer día alguien tiene que lavar”, bromea el chef, empresario y productor agropecuario, que este año también lleva adelante con su hermano Roberto el nuevo espacio gastronómico de la Exposición Rural.

Buen matero, él tiene su pava, pero admite que hace seis meses Sofía trajo una eléctrica y que es práctica. La arrocera se la recomendó la cocinera china Karina Gao, usa la mitad de la energía que si se lo cocinara en el anafe y “queda bárbaro”. Hace poco fue a grabar con El Gourmet al Litoral y en el INTA usan arroceras porque el grado de dilatación del grano es diferente: “Comemos arroz blanco, sin nada, para comer en una ensalada o en vez de pan, como acompañamiento”.

El chef derriba un mito: que los cocineros tienen un solo cuchillo. “Tenemos uno que usamos, pero después tenemos un montón”, aclara y exhibe su colección en una pared, muchos de ellos japoneses (“Son muy lindos, pero para cocina japonesa, en las cocinas argentinas usamos cuchillos un poco más pesados”). También muestra, en la mesada, un organizador de cuchillos. “Si te va bien, si te ganaste el Quini 6, comprate esto. Es lo mejor que te puede pasar”, recomienda, porque se tienen todos los cuchillos a mano y ordenados.

Petersen dice que con su pareja cada vez tienden más a la simpleza. “¿Viste que el cocinero está siempre buscando el umami, los sabores? Nos empezamos a hacer sommeliers de las cosas simples. Vamos a hacer un buen mate, y entonces estudiamos cómo hacerlo. Lo mismo pasa con el café y el vino, con el pan, la carne, el agua. Es empezar a buscar los sabores”, apunta.

Y si hablamos de sabor y simpleza, aparece el proyecto que lo tuvo embarcado en estos meses: su libro sobre milanesas que editará Catapulta y está próximo a salir.Petersen está escribiendo un libro sobre milanesas. Foto Rafael Mario Quinteros Petersen está escribiendo un libro sobre milanesas. Foto Rafael Mario Quinteros

“Para mí, es el plato más rico de la Argentina. Porque la pasta, la pizza, el asado nos llaman un montón. Pero hay un plato que comemos todos en cualquier momento de nuestras vidas y nos lleva mucho a la infancia, que es la milanesa. Así que estamos haciendo un libro, que no es tanto de recetas sino más de la cultura de la cocina argentina”, comenta.

Y sigue con su análisis de qué expresa la milanesa: “Los inmigrantes traen una receta de Europa a la Argentina, en ese momento de granero del mundo. Y se transforma de un plato típico austriaco o italiano, depende de cómo quieras contar la historia, en el plato argentino. Porque estamos llenos de trigo, estamos llenos de carne, estamos llenos de creatividad y entonces un plato que puede ser de la carencia, porque tenés tenés poca carne y tenés que ponerle pan rallado para agrandarla, se transforma”.

Petersen descubrió que no hay una receta de milanesa, porque la receta es la que a cada uno le hicieron en su casa. “Si eran finitas y con doble ajo, para vos van a ser así. La mía es perfecta, porque siempre la que uno hace es perfecta”, afirma.Al horno. Así prepara Petersen sus milanesas. Foto Rafael Mario Quinteros Al horno. Así prepara Petersen sus milanesas. Foto Rafael Mario Quinteros

A él le gustan de un grosor intermedio (ocho o diez milímetros) y de los cortes típicos como bola de lomo, cuadrada, nalga y peceto, o bife de chorizo si se quiere más gourmet. Se pasa por una buena “huevada o inglesa, como se dice en las cocinas”, los huevos con sal, pimienta, ajo, perejil, un poco de mostaza y un poco de leche (“Ayuda a que la carne se tiernice”) y por el pan rallado. Pan y no rebozador es clave: “El rebozador es algo de la industria que le da color y queda uniforme. Pero el pan rallado habla del sabor del pan, de tu casa, del barrio”, apunta.

¿Y cómo cocinarlas? Cocinar al horno para comer sano es otro mito, porque lleva la misma cantidad de aceite que la fritura. “Es más si querés tener el olor a frito en tu casa o no”, dice, y también que si se fríe, se desperdicia más aceite y que por eso suelen hacerlas al horno salvo que sean muchos.

La técnica Petersen de la milanesa al horno perfecta

  • El aceite es muy importante: también, que nunca se pasen de cocción
  • El horno se precalienta a 180/200 grados
  • Una vez que está caliente, poner una placa
  • Recién cuando la placa se calentó, sacarla y ponerle el aceite
  • El aceite tiene que burbujear, porque la placa simula la sartén
  • Poner las milanesas y llevar al horno entre cinco y diez minutos
  • Darlas vuelta (del lado de la chapa estará dorada) y cocinarlas otros cinco minutos

Pasado el tiempo y mientras la charla sigue, Christian saca la asadera del horno, sirve las milanesas, las rocía con jugo de limón y las comparte con Clarín, en la barra del centro de la cocina. El corazón del corazón de la casa, donde siempre reconforta una buena milanesa.

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El reconocido chef nos muestra su alacena y nos revela su secreto para cocinar la mejor milanesa.

Las especias de Juan Gaffuri

Juan Gaffuri tiene a su cargo cuatro cocinas. Es chef ejecutivo y director de Alimentos y Bebidas del hotel Four Seasons Buenos Aires, y el cerebro (y el paladar) detrás de los premiados espacios gastronómicos del hotel: el restaurante Elena, la parrilla Nuestro Secreto y el bar Pony Line, además del servicio de banquetes.

Pero “la” cocina de Gaffuri es la que él mismo armó en su departamento, que tiene literalmente a la vuelta del hotel. Y lo de armó también es literal: Gaffuri estudió Gastronomía en The Bue Trainers, pero nunca dejó de aplicar lo que aprendió en la secundaria de Rosario donde se graduó como técnico electromecánico. Así que compró las placas de fibrofácil, cortó el mármol, hizo instalaciones y armó esta coqueta y funcional cocina en la que recibe a Clarín.Juan Gaffuri es chef ejecutivo y director de Alimentos y Bebidas del Four Seasons. Foto Rafael Mario Quinteros Juan Gaffuri es chef ejecutivo y director de Alimentos y Bebidas del Four Seasons. Foto Rafael Mario Quinteros

Cuenta que tiene previsto remodelarla y sumar la dependencia para ampliarla, y su esposa, Guadalupe, bromea que esta vez la obra sí la va a hacer un arquitecto. Es que hoy el cocinero, que también se probó el año pasado como jurado televisivo en el reality de cocina Pasaplatos, pasa buena parte del mes viajando, difundiendo la cocina argentina, las carnes de pastura y las técnicas de parrilla que hicieron famosos a los restaurantes del hotel.

La gastronomía de un cinco estrellas es muy demandante. Por el volumen y por la perfección que se exige en cada plato. En casa, Gaffuri cocina mucho, pero en otro plan: de encuentro familiar. Tiene dos hijos, Amalia (10) y Nacho (12), a quienes de chiquitos estimuló en descubrir sabores.Las ollas preferidas del cocinero, y su sartén para la tortilla. Foto Rafael Mario QuinterosLas ollas preferidas del cocinero, y su sartén para la tortilla. Foto Rafael Mario Quinteros

En familia amasan pastas juntos, comen platos con vegetales (“Les gusta el brócoli pero también la papa: son argentinos”), y por supuesto milanesas (“Pero no las hago, se las compro a mis amigos los Petersen”). También, arroz. Nacho es fanático y por eso en un viaje a Japón compró una arrocera eléctrica: la muestra y cuenta que hay que traducir las teclas con Google, pero “lográs una textura increíble en el grano de arroz”.

También se trajo cuchillos de Japón, y exhibe dos: uno especial para panes delicados que combina filo serrucho con uno liso para no dañar la miga y otro para niños con punta redondeada. Los tiene imantados junto a la pared de su estación de trabajo, una bloque de madera de incienso con la veta vertical, “así cuando uno corta, la veta naturalmente se cierra y eso hace que no proliferen las bacterias. Las tablas siempre tienen que estar bien hidratadas. Periódicamente le pongo aceite de oliva”.Los cuchillos que el chef trajo de Japón. Foto Rafael Mario QuinterosLos cuchillos que el chef trajo de Japón. Foto Rafael Mario Quinteros

“Para mí ser cocinero pasa por saber probar y la memoria de los sabores y los aromas. Ese es un gran cocinero: el que puede reproducir algo que le queda en la memoria a partir de lo que prueba. Por eso las recetas para mí no están escritas, sino que están ahí, en esa memoria RAM del cerebro que se guarda a partir de lo que voy probando, por los viajes por el mundo, lo que pruebo de otros cocineros y demás. Ese, probar, también me parece el mejor approach para los chicos”, expresa.

Gaffuri hizo toda su carrera en la hotelería y trabajó muchos años en el exterior, en hoteles de la cadena en EE.UU., México y Egipto. En ese derrotero, se abasteció de infinidad de conocimientos, técnicas, ingredientes y sabores, que hoy aplica en sus recetas. En el DF aprendió todo sobre los chiles y en Sharm El Sheikh, donde tenían un restaurante hindú, todo sobre las especias.

“La cocina es metódica: primero se rehogan los vegetales. Pero en la hindú es al contrario: primero se tuestan las especias enteras. Después, se empieza con los vegetales, que normalmente son cebolla, ajo y jengibre, y puede ser la base. Luego se agregan las especias en polvo tostadas. Ese es el proceso típico del curry”, describe. Y remarca que “los procesos no se pueden acelerar: no es lo mismo rehogar una cebolla 30 segundos que diez minutos, para que largue todos sus azúcares”.

Parte de ese background lo plasmó en un libro, Pensar restaurantes y cocinar. Allí están varios de sus hits, como la hamburguesa de wagyu, las mollejas con papa y huevo o el arroz negro con langostinos y chistorra.Gaffuri con su libro, Pensar restaurantes y cocinar. Foto Rafael Mario QuinterosGaffuri con su libro, Pensar restaurantes y cocinar. Foto Rafael Mario Quinteros

Gaffuri abre una puerta del bajo mesada y saca dos ollas de fundición francesas, sus favoritas. En la más pequeña y alta hace los guisos y la boloñesa. Paréntesis: “La bolognesa es un ragú. Lleva apio, zanahoria y cebolla, no ajo. Se hace el sofrito de los vegetales y se pone la carne: 50% vacuna, 50% de cerdo. Extracto de tomate, laurel, un poquito de tomillo fresco, vino tinto. Cuando se reduce, puré de tomate. Y llevo esta olla al horno 180° y cada 25 minutos la revuelvo un poquito”.

Sigue el chef y muestra la más baja y plana que usa para el arroz. Hace el sofrito con un poco de cebolla, ajo y pimentón con aceite de oliva, luego agrega azafrán en hebras (“Hay que activarlo en la propia grasa”) para después agregarle tomate fresco rallado. “Esa es mi base del arroz. El sofrito es fundamental, y también un buen caldo”, apunta.Rotuladas. Las especias, como las etiquetan también en el hotel. Foto Rafael Mario QuinterosRotuladas. Las especias, como las etiquetan también en el hotel. Foto Rafael Mario Quinteros

Y saca una sartén que en la casa sólo tienen permitido usar para una preparación: la tortilla. En realidad son dos sartenes que se enganchan y permiten darla vuelta sin que se rompa. ¿Los secretos de Gaffuri para la tortilla? “La tortilla es papa y huevo. Todo lo demás que le queramos poner es opcional. La papa se confita, no se fríe: se hace en un aceite a no muy alta temperatura, no necesita tomar color. Lo fundamental es batir los huevos y meter la papa en caliente dentro de esos huevos para que vaya soltando el almidón y le da cremosidad. En la sartén es prácticamente vuelta y vuelta, nos va a quedar perfecta por fuera y cremosa por dentro, no el huevo líquido porque el almidón trabajó”.

Sobre una pared, Juan tiene las especias y condimentos que más usa. No hay hierbas secas (“Son muy fuertes”), sólo utiliza frescas. Pero sí una variedad de sabores y aromas que trae de sus viajes o que quienes viajan le regalan. ¿Cómo conserva los condimentos? La mayoría en frascos de vidrio (“Son herméticos y se pueden reutilizar”), rotulados con etiquetas, igual que en el hotel. A los cocineros aficionados les recomienda reemplazar los preparados “que adentro tienen un montón de cosas que no sabés qué son” e invertir “en cosas que te van a aportar sabor. Después es jugar y encontrar los sabores y los aromas”.

Los consejos para usar los condimentos de Juan Gaffuri

El chef irá mostrando esos tesoros, y con ellos revelando tips y secretos que cualquiera puede usar en su casa:

  • Anís estrellado. No se usa sólo para postres: queda muy bien en estofado de aves o con pescado. Tostar en manteca o aceite al inicio de la preparación y después agregar el pollo o el pescado.
  • Cardamomo. Tiene notas cítricas, va bien con pollo y pescado, y se activa tostando en materia grasa. Lo usa para el butter chicken, una receta hindú. Marina pollo en yogur natural sin azúcar mezclado con cardamomo entre 24 y 48 horas. Para hacer el curry, procesa igual cantidad de ajo y jengibre y lo dora en manteca clarificada con cardamomo en polvo y cebolla. Agrega extracto de tomate, puré de tomate y crema, y cocina el pollo en ese caldo cremoso.
  • Canela. Además de los dulces, la usa en el curry de cordero (“Match perfecto”). De vuelta, inicia con la canela en rama en materia grasa (“Es difícil cocinar sin grasa porque es la transmisora del sabor”), y termina con canela en polvo.
  • Picante. En vez del chile mexicano, muestra un frasco de peperoncino italiano. Lo pone en la materia grasa con la que rehoga los vegetales para iniciar un estofado: “El picante va super bien con las carnes y las pastas”.
  • Sal. Gaffuri tiene un montón de sales, como una con limones de Sicilia y flor de sal de las salinas de Jujuy (los cristales que brotan cuando sale el sol y se recolectan a mano). Dice que como estas sales tienen un sabor mucho más intenso y se utiliza menos cantidad, son más saludables. “Siempre salo la carne antes de cocinarla. Es fundamental para formar una costra y que penetre en la carne, al menos que hagas una salmuera”, aconseja sobre la parrilla.

Terminando la charla, el asado le da a Gaffuri el puntapié para volver a sus orígenes, y a su interpretación de cocina argentina.

“Para mí, el asado al asador es fundamental de la parrilla argentina. Cuando venía con mi viejo a Buenos Aires iba a la calle Lavalle y había asadores en la vereda. Es mi memoria y entonces hoy tenemos en Nuestro Secreto un asador y lo hacemos durante ocho horas, 24 horas en salmuera, carnes maduradas 21 días. Tratamos de elevar lo que es la cocina tradicional argentina. El asado a la cruz la verdad que es único. A todos los que vienen les vuela la cabeza. Y a mí, las elaboraciones largas al fuego, es lo que me encanta hacer”. Lo único que no puede preparar en la cocina de este departamento.

¿Propina obligatoria? Cuál es el cambio que hará el Gobierno en bares y restaurantes

Fuente: Clarín – Es un uso y costumbre, pero está prohibida. Ahora, el Gobierno nacional quiere regularla. ¿De qué hablamos? De la propina, algo cada vez menos habitual para los clientes de bares y restaurantes, pero imprescindible para los empleados gastronómicos.

El tip no está especificado en el listado de 27 funciones particulares del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, pero el área a cargo de Federico Sturzenegger está trabajando en un decreto que formalizará la propina para habilitar su inclusión en el ticket.

Reclamo histórico de los gastronómicos, el tema de la propina explotó en los últimos meses. Al recorte de este ítem que muchos consumidores vienen aplicando por la disparada inflacionaria, se sumó la expansión del pago con tarjeta de crédito y billeteras virtuales.

A la hora de abonar la cuenta, el “no tengo efectivo” para la propina empezó a ser la moneda corriente. Los restaurantes rechazan incluirla en el cobro con tarjeta o QR porque, aseguran, no es parte del salario ya que queda al arbitrio del comensal. Sería un pago a voluntad que le hace el cliente al camarero, sin que el restaurante tenga nada que ver en el medio.

Pero el asunto es mucho más complejo. Hoy, según dirigentes gremiales, de acuerdo al restaurante la propina como mínimo duplica el salario que percibe un trabajador gastronómico y hasta puede cuadruplicarlo en los de mayor categoría. También, señalan, en el rubro hay una alta evasión fiscal y el no blanqueo de la propina la propicia.

¿Qué cambiaría ahora? Si bien aún no es oficial, el decreto saldaría ese gris que estableció uno de los cuatro convenios colectivos de trabajo del sector hotelero gastronómico, que prohibió expresamente la propina. Históricamente, los gastronómicos cobraban propina y también un laudo, que la dictadura militar eliminó en noviembre de 1981.

Antonio Terrones es un reconocido obstetra, que en su juventud trabajó como gastronómico y explica cómo era ese sistema hoy olvidado: «Teníamos sueldo, laudo y propinas. El laudo era un ítem incluido en la cuenta que pagaba el comensal y todos los días aumentaba un pozo que a fin de mes se repartía entre todos, según un puntaje para el mozo, el asistente de cocina, y así todo el personal. Era una forma de compensar a quienes no recibían propina por no estar en el salón».

El decreto no hablará de laudo sino de la propina: dejará bien en claro que no es parte del salario, y como tal no pagará cargas sociales. Pero al permitirla y regularla, se incluirá como ítem en la adición, al igual que ocurre en otros países como Estados Unidos, Brasil o Uruguay.

No obstante, la propina no será obligatoria: seguirá quedando a libre arbitrio del comensal pagarla y cuánto.

“Al argentino siempre le parece exagerado dejar más del 10% y amarrete dejar menos”, puntualiza Dante Camaño, secretario general de la seccional Capital de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA) sobre el número que es uso y costumbre del uso y costumbre que es la propina.

Sin embargo, por varias razones ese porcentaje muchas veces no se alcanza. Hay clientes que lo calculan estrictamente según el grado de satisfacción con el servicio; otros, que a la hora de abonar una cuenta que les suena abultada, recortan por la gratificación para el mozo; otros no tienen en claro el peso que tiene en el salario del personal; y también está el que quiere dejar, pero no tiene efectivo.

“Hoy, en una cena para cuatro personas en un restaurante de buen nivel estamos hablando de entre $ 200.000 y $ 250.000. Tenés que ir con una bolsa de plata”, plantea Juan José Bordes, secretario gremial de la UTHGRA.

Camaño, quien remarca que cuando era legislador en 1991 presentó un proyecto de ley para que se incluyera la propina como un porcentaje del salario, cree que nunca se avanzó por rechazo del sector empresario.

Cambio de época

Hoy, el nuevo escenario hizo que los pagos se bancaricen cada vez más. “El 90% de la facturación es por tarjeta. Y ya hay países, como los nórdicos, que están hablando en pocos años de eliminar la emisión de dinero”, dice sobre el impacto de las billeteras virtuales.

Bordes apunta que desde el sindicato hace años que vienen reclamando por la inclusión de la propina. Se reunieron con funcionarios del Gobierno nacional y también con el diputado Julio Cobos, que presentó un proyecto de ley de propina digital. “Está la decisión política. Hay que ver cómo se va a regular y repartir”, detalla.

Actualmente, el reparto de la propina también es disímil y lo establece el personal en cada restaurante. Bordes explica que hay varios sistemas. El antiguo, “al tronco”, que siguen usando muchos restaurantes, es poner en una lata toda la propina y repartirla después en partes iguales entre todo el personal, tanto el que está en salón como el de cocina. En otros casos, los mozos dejan un 20% de su propina para repartir entre el personal de cocina. Y hay restaurantes en los que el camarero se lleva todo lo que recibió.

“El reparto tiene que ser similar para todos porque la gastronomía es un trabajo conjunto. El mozo es la cara visible del establecimiento, pero la cocina es fundamental”, remarca.

Ambos dirigentes gremiales coinciden en que la medida oficial es positiva en una actividad que sufrió una caída de la facturación del 35% en lo que va del año. Y creen que el blanqueo de la propina contribuirá a reducir la evasión fiscal que, estima Bordes, en el sector es del 35%.

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Cuenta DNI: qué días hay 30% de descuento en restaurantes durante las vacaciones de invierno 2024

Fuente: Ámbito – Este beneficio es ideal para utilizar en las próximas semanas con la familia o amigos.

Cuenta DNI, la billetera digital de Banco Provincia ofrece beneficios y promociones a sus usuarios todos los meses. Gracias a la llegada de las vacaciones de invierno, suma un beneficio muy especial. Se trata de un descuento único para comercios adheridos de gastronomía para los fines de semana.

Según el comunicado del banco: «Este nuevo ahorro llega en un mes en el cual las familias realizan actividades durante las vacaciones de invierno y muchas personas se reúnen en bares y restaurantes con motivo del Día de la Amistad, que se celebra el 20 de julio».

Cuenta DNI: cómo es el descuento en restaurantes durante julio 2024

Cuenta DNI ofrece un 30% de descuento los sábados y domingos en comercios adheridos de restaurantes, bares, heladerías y locales de comida rápida. El tope semanal de $5.000 por persona, que se alcanza con una compra de $16.600.

Todos los descuentos de Cuenta DNI en julio 2024

  • Carnicerías, granjas y pescaderías:35% de descuento los sábados en comercios adheridos, con tope semanal de $5.500 por persona, que se alcanza con $15.700 en consumos.
  • Comercios de cercanía:20% de ahorro de lunes a viernes, con tope mensual de $5.600 por persona. Se alcanza con $28.000 en consumos.
  • Personas mayores de 60 años:30% de ahorro, de lunes a viernes en comercios de cercanía adheridos a Cuenta DNI. Tope mensual de $6.600 por persona que se alcanza con $22.000 en consumos.
  • Supermercados: 20% de descuento el sábado 6 y el domingo 7 de julio en supermercados Coto y Toledo, sin tope de reintegro. Beneficio también vigente con tarjetas de débito y crédito.
  • Ferias, mercados y eventos:40% de descuento todos los días, con tope semanal de $4.000. Se alcanza con $10.000 en consumos.
  • Jóvenes de 13 a 17 años:$2.000 de reintegro en recargas de transporte y celulares por persona por mes.
  • Especial universidades:40% de ahorro en comercios adheridos de universidades bonaerenses, con tope semanal de $4.000 por persona. Se alcanza con $10.000 en consumos.
  • Garrafas:40% en la compra de garrafas, con tope de $3.600 por persona por mes.

Cuánto sale comer en Güerrín, la pizzería más buscada de Buenos Aires en 2024

Fuente: IProfesional – Güerrín fue fundada en 1932, unos años antes que el Obelisco y se convirtió en un ícono de la avenida Corrientes y una parada obligatoria para los turistas.

Güerrín, una de las pizzerías más emblemáticas de Buenos Aires, sigue atrayendo tanto a locales como a turistas. Fundada en 1932 y ubicada en la famosa Avenida Corrientes, Güerrín es sinónimo de pizza porteña, destacándose por su masa gruesa y generosa cobertura de muzzarella.

Se transformó por completo, de lo que fue el día de su apertura, atendiendo a una única barra para comer al paso; a atender a casi 1000 personas por día. En 2024,comer en Güerrín es unaexperiencia que combina tradición y sabor a precios únicos.

Durante la época dorada del teatro, el local se pobló de reconocidas figuras que pasaban a degustar una pizza e iluminaban de flashes el negocio. Desde Jorge Porcel, Alberto Olmedo, Tato Bores y hasta Susana Giménez, fueron algunos de sus ilustres visitantes.

A la barra se le sumó más adelante el salón familiar y luego el segundo piso lo que le dio capacidad para atender a más de 800 personas. Y en cada jornada, en sus cinco hornos hornean a leña alrededor de 1000 pizzas.

Sus famosas pizzas al molde se amasan a mano y llevan la salsa especial de la casa, que se hace con tomate perita, orégano, ají molido, ajo y sal. Siendo la pizza de mozzarella con fainá el clásico entre los comensales. Los fines de semana la clientela se incrementa y pueden llegar a despacharse 1.500 pizzas por día.

Horarios y ubicación

  • Corrientes 1368
  • Abierto todos los días de 11 a 01 hs
  • Funciona sin reservas
  • Instagram: @pizzeriaguerrin

Güerrín sigue siendo una parada obligatoria en Buenos Aires para aquellos que desean disfrutar de una auténtica pizza porteña

Güerrín sigue siendo una parada obligatoria en Buenos Aires para aquellos que desean disfrutar de una auténtica pizza porteña

Cuánto sale una cena en Güerrín, la pizzería más emblemática de la Ciudad de Buenos Aires

Sobre las cuadras donde la calle Corrientes se convierte en peatonal hay diferentes opciones gastronómicas para completar el paseo por la Ciudad de Buenos Aires.

Por dar un ejemplo, una pizza chica de muzzarella cuesta arriba de los $13.000 en Güerrín. En cuanto a las bebidas, mientras que cada chop de cerveza vale arriba de los $3.000, las gaseosas, el agua mineral o saborizada rondan los $2.000. De esa manera, para dos personas se calcularía un monto aproximado entre los $17.000 y $19.000 en total y teniendo en cuenta una cena low cost.

El costo de una cena en grupo en Güerrín

Según un video reciente de TikTok, los precios de Güerrín se han ajustado para seguir siendo competitivos en el mercado porteño.

  • Una pizza de muzarella y provolone: $24.700
  • Schweppes de pomelo; $2400 (por persona)
  • Jarra de fernet com coca: $8.300
  • Heineken (tirada) $9600
  • Faina $1.100
  • Sopa inglesa; $7.100
  • Tiramusú: $7.100

Considerando una cena para un grupo de 4 personas, una cena en Güerrín tiene un valor aproximado de $90.000. Este número puede variar dependiendo de la cantidad de bebidas, si la cena incluye postre y cantidad de personas.

Experiencia y ambiente

Comer en Güerrín no es solo una cuestión de degustar una excelente pizza, sino también de sumergirse en una experiencia única. La pizzería mantiene un ambiente bullicioso, característico de la Avenida Corrientes, donde se mezclan el ajetreo de la ciudad con la calidez del servicio. Los camareros, muchos de los cuales llevan años trabajando en Güerrín, añaden un toque de familiaridad y profesionalismo que enriquece la visita.

La decoración del lugar, con sus azulejos clásicos y carteles antiguos, transporta a los comensales a una época pasada, recordándoles la rica historia de este establecimiento. Es común ver tanto a familias locales como a turistas disfrutando de sus comidas, lo que convierte a Güerrín en un punto de encuentro cultural.

Güerrín sigue siendo una parada obligatoria en Buenos Aires para aquellos que desean disfrutar en una auténtica pizzeria porteña. Sus precios accesibles y la calidad constante de sus platos hacen que siempre sea una excelente opción. Ya sea que estés de visita en la ciudad o seas un residente habitual, una comida en Güerrín es una experiencia que combina tradición, sabor y cultura en el corazón de Buenos Aires.

Vuelve El Oso, con un mundo entero en conflicto alrededor de la cocina y un chef en busca de la perfección

Fuente: La Nación – Los protagonistas de una de las series más aplaudidas y premiadas de los últimos tiempos anticipan cómo será la temporada 3, disponible en forma completa desde este miércoles 17 en Disney+.

No nos alcanza un solo concepto para definir hacia dónde va El Oso (The Bear) en su tercera temporada. Este miércoles 17, con la llegada simultánea a Disney+ de los 10 episodios de la serie más esperada de los últimos tiempos, vuelve a abrirse la puerta de un relato que no para de crecer (de manera extraordinaria) desde que tímidamente instaló en su primera temporada ese verdadero mural de conflictos humanos alrededor de una cocina, o mejor dicho de los acomplejados sueños del genial cocinero Carmy Berzatto (Jeremy Allen White).

Allí, entre esas cuatro paredes, contemplamos el mundo. Reducido y adaptado en este caso a la escala de una familia disfuncional ampliada (parientes, amigos, relaciones con distintos márgenes de posibilidad) que no consigue nunca ponerse de acuerdo pero que, al mismo tiempo, sigue de manera asombrosa unida e integrada alrededor de un proyecto común.

Ebon Moss-Bachrach, Ayo Edebiri y Jeremy Allen White, en uno de los momentos iniciales de la temporada 3
Ebon Moss-Bachrach, Ayo Edebiri y Jeremy Allen White, en uno de los momentos iniciales de la temporada 3 Disney +

En la presentación para la prensa internacional de esta tercera temporada, de la que participó LA NACION, el elenco principal de El Oso no se puso de acuerdo para identificar con una sola palabra el significado de esta crucial tercera temporada, aguardada por la creciente legión de fans de la serie a través de una vigilia que parecía no terminar nunca.

Lionel Boyce, quien personifica al pastelero Marcus, eligió el término “elevación”, que también podría entenderse como altura o encumbramiento. Abby Elliott (Natalie, la hermana de Carmy Berzatto, atravesando la fase final de su embarazo en esta nueva temporada) optó por “perfección”. White dijo “desafíos”, y Ayo Edebiri (la sous chef Sydney Adamu, cada vez más protagonista en la cocina y en la trama de la serie) quiso desde allí ir más lejos, con un juego basado en un único término. Dice que los personajes son personas desafiantes dispuestas a desafiar cada nuevo desafío.

El intercambio sigue hasta que White, dueño -como protagonista y estrella principal del programa- del privilegio de tener la última palabra, transformó en afirmación un concepto planteado como pregunta por Matty Matheson (Neil Fak), el único chef de verdad que tiene el elenco de El Oso en la vida real. Es “razzle dazzle”, una expresión en inglés que hemos conocido a través de una de las canciones más conocidas del musical Chicago y que puede traducirse como escándalo o alboroto.

Aquel viaje al pasado familiar

Sobran precisamente alborotos en la trama previa de El Oso. Y también en la continuidad de la historia, que está por llegar al streaming. Vale recordar cuál fue la cumbre de ese estado de cosas (y de ánimos): apareció, por supuesto, en el memorable episodio 6 de la segunda temporada, la crónica de aquél banquete familiar que ponía en suspenso durante una hora (el doble de duración de cada uno de los episodios restantes) toda la historia de la serie a través de un viaje al pasado.

Ya hemos visto cómo la serie va y viene en el tiempo, con viajes que sirven para configurar la identidad de los personajes principales, sobre todo en el caso de Carmy. Y no solo eso. Esas reminiscencias también nos ayudan a entender cada vez más el sentido de los lazos que unen a los personajes entre sí de varias maneras. Algunos forman pequeñas sociedades, otros parecen dispuestos a cortarse solos, están los que se mueven a través de la necesidad de afecto y otros que actúan bajo el impulso de la tensión y la ansiedad.

Jeremy Allen White vuelve a darle forma a los conflictos interiores por los que atraviesa Carmy Berzatto, el protagonista de El Oso
Jeremy Allen White vuelve a darle forma a los conflictos interiores por los que atraviesa Carmy Berzatto, el protagonista de El Oso Disney +

White dirá en un momento de la charla virtual con los medios internacionales que el sentimiento que más mueve e inspira a Carmy es la búsqueda de perfección.Desde que llegaron los premios (nada menos que 10 Emmy en 2023, entre ellos el de mejor serie de comedia) y una expectativa colosal por saber cómo será la temporada 3, la presión y la ansiedad adquirieron nuevas dimensiones. “Pero después de dos semanas de reencontrarme con todos estos grandes actores y este maravilloso equipo todo parece haber vuelto a su lugar. Y todos nos sentimos felices y de nuevo todo nos parece posible”, señala.

Poco después, en un breve diálogo mano a mano con LA NACION, Matheson agregará que los premios y toda la creciente ansiedad con la que se aguarda la llegada de esta tercera temporada no tiene por qué condicionar el trabajo diario del equipo creativo y técnico de la serie: “Christopher Storer, como líder, siempre creyó en la idea de que esta es la mejor historia para ser contada. Nosotros confiamos en él y mantenemos la misma mentalidad que teníamos en la temporada pasada. Tal vez se sienta algo de presión afuera, pero lo nuestro pasa por seguir adelante, ponernos las anteojeras y concentrarnos en lo que sabemos hacer”.

¿Hay una línea paralela entre el desarrollo de un plato, tal como lo vemos en la serie, y lo que ocurre con los personajes encargados de llevar adelante ese proceso? En ese mismo encuentro responde Ricky Staffieri, que personifica a Theodore Fak, el hermano de Neil: “En la cocina cada personaje siempre trata de encontrar y sacar algo nuevo. Y lo mismo pasa con nuestro trabajo como actores. Hay cosas valiosas y muy interesantes, por ejemplo, que no aparecen hasta que hacemos la última toma”.

Jeremy Allen White, un chef en busca de la perfección. Así lo veremos en el episodio inicial de la temporada 3 de El Oso
Jeremy Allen White, un chef en busca de la perfección. Así lo veremos en el episodio inicial de la temporada 3 de El Oso Disney +

La temporada 3 empieza exactamente en el momento en que se pone en marcha El Oso, un restaurante de categoría en Chicago al que Carmy quiere volcar todo su obsesivo perfeccionismo. Es un proyecto a la altura de las ambiciones de su carrera como chef al que se va a sumar todo un equipo que lo acompaña desde la experiencia previa haciendo los mejores sándwiches de carne de Chicago con la antigua marca familiar.

El tenso episodio final de la temporada 2, que transcurre en la mayor parte del tiempo con Carmy encerrado dentro de la cámara frigorífica del restaurante a punto de ser inaugurado, parece haber dejado huellas en el camino que el personaje emprende a partir de ahora. Lo vemos poniéndose al frente de un proyecto en el que confluyen todas las sensaciones que vivió durante su formación.

“Lo que hace Carmy después de salir de ese encierro tan frío es volver a sepultarse en su trabajo y desafiarse a sí mismo. Al hacerlo, desafía al mismo tiempo a todos los que se mueven alrededor suyo. Todo a su alrededor multiplica ese desafío personal”, explica White.

El anticipo de la temporada que viene circulando desde hace varios días mostró, entre otras cosas, una suerte de “contrato de asociación” entre Carmy y Sydney. Ese acuerdo también determinará el tipo de relación que ambos establecerán de aquí en más. “Creo que es mucho más caótico de lo que ella imaginó o idealizó antes de empezar ese trabajo compartido”, explica Edebiri.

El elenco completo de El Oso, reunido a fines de junio pasado para la presentación de la tercera temporada en Los Angeles
El elenco completo de El Oso, reunido a fines de junio pasado para la presentación de la tercera temporada en Los AngelesVALERIE MACON – AFP

De paso, por si había alguna duda, White y Edebiri responden con un “no” rotundo a una pregunta acerca de un posible acercamiento entre ambos con alguna implicancia romántica. La inquietud surgió sobre todo porque el final de la temporada 2 deja varias incógnitas al respecto en torno de la relación entre Carmy y Claire (Molly Gordon). Al respecto, el tráiler deja a la vista una frase incómoda del chef: “No puedo perder el tiempo con ella”. Estamos ante una nueva incógnita que queda abierta y expuesta en estos diez nuevos episodios disponibles desde este miércoles 17.

Este regreso promete también mucha tirantez entre Carmy y Richie (Ebon Moss-Bachrach), su primo y enemigo íntimo. “La temporada 3 comienza no muy lejos de donde termina la segunda –dice el actor- y Richie se instala en un lugar en el que queda expuesto a una suerte de evolución personal en la que empieza a vislumbrar un camino de crecimiento personal. Pero una cosa es verlo y otra es caminarlo. No hay allí una sola dirección visible. Es un ida y vuelta permanente en el que no todo resulta claro”.

Ese juego de ir y venir en el tiempo será, de acuerdo a todos los anticipos, una de las constantes de esta tercera temporada. Todavía hay muchas cuestiones por resolver alrededor de uno de los disparadores fundamentales de la trama, el recuerdo de la tragedia personal de Mikey (Jon Bernthal), el hermano de Carmy y primer mentor de todos los proyectos culinarios familiares.

Sydney (Ayo Edebiri) y Carmy (Jeremy Allen White) en la cocina de El Oso; desde este miércoles 17 está disponible, completa, la temporada 3 por streaming
Sydney (Ayo Edebiri) y Carmy (Jeremy Allen White) en la cocina de El Oso; desde este miércoles 17 está disponible, completa, la temporada 3 por streamingDisney +

Habrá también muchas más escenas dominadas por los primeros planos, como si el equipo creativo encabezado por Christopher Storer (creador y showrunner) se propusiera hacer de esa manera una indagación más profunda en la personalidad y los sentimientos de cada uno de los personajes.

El micromundo

La expectativa por descubrir y conocer la nueva temporada de El Oso no se agota en la dimensión humana. Detrás de los sueños de Carmy y del fascinante micromundo que gira alrededor suyo hay aquí un concepto visual y narrativo que en más de un punto se distingue de los demás.

Esa originalidad aparece, por ejemplo, en el modo en que los personajes viajan al pasado a través de cortes abruptos e inesperados de la línea temporal o bien mediante breves reminiscencias. También en el modo en el que se expresan los estados de ánimo más profundos de cada personaje, con la cámara fija y muy cercana detenida en sus rostros. Allí, con el mínimo énfasis debe surgir la máxima expresividad. O a través de la música (popular o clásica) y de un montaje que explica tal vez mejor que cualquier otro programa (de ficción o extraído de la realidad) cómo se relacionan las personas que trabajan en una cocina y las creaciones (los platos) que surgen de su imaginación.

Pero a veces la inspiración es algo que escapa a nuestro control. Así parece creerlo Ebon Moss-Bachrach frente a LA NACION cuando dice que hay que tomar el ejemplo de los chefs: “Lo que vale es seguir buscando. Si no estamos constantemente abiertos al cambio, terminamos por repetirnos. La inspiración puede aparecer en cualquier momento, pero quedarnos solamente en ese impulso no sirve, porque se nos va de las manos en un instante. El cambio de verdad aparece cada vez que insistimos y perseveramos en hacer cosas nuevas. Cuando nos permitimos cambiar”. Tal vez el secreto de El Oso pase por esa búsqueda constante de nuevos ejes y ángulos diferentes para seguir hablando de los sueños de Carmy Berzatto y de quienes lo acompañan en ese mundo autosuficiente, que cabe en las cuatro paredes de una cocina.

Sturzenegger busca cumplir un viejo anhelo de Barrionuevo: va por la formalización de las propinas para los gastronómicos

Fuente: iProfesional – Ahora Sturzenegger va por la formalización de las propinas para los gastronómicos y avanza en una idea que lo une a Barrionuevo

Federico Sturzenegger, el ministro de Desregulación, analiza una medida que impactará directamente en la actividad gastronómica. Esta medida habilita la inclusión de las propinas en las facturas de pagos en restaurantes, bares y hoteles, una propuesta que había sido solicitada previamente por el líder gremial Luis Barrionuevo.

El decreto, que se espera sea firmado en las próximas horas por el presidente Javier Milei, permitirá que las propinas que reciben los mozos y empleados gastronómicos sean integradas formalmente en las facturas emitidas por los establecimientos. Esta iniciativa surge como respuesta a la problemática de la falta de efectivo, que frecuentemente impide que los trabajadores reciban propinas adecuadas.

Según los defensores de este proyecto, la inclusión de las propinas en las facturas no solo garantizará que los empleados reciban una compensación justa y constante, sino que también obligará a los gremios del sector a modificar sus convenios colectivos para adaptarse a la nueva normativa.

Esto implicará una reestructuración en los acuerdos laborales vigentes, asegurando que las propinas sean reconocidas oficialmente como parte del salario de los trabajadores gastronómicos.

Inclusión de las propinas en las facturas de pago: un viejo pedido de Luis Barrionuevo

Luis Barrionuevo, líder del gremio gastronómico, ha sido un ferviente defensor de esta propuesta desde hace varios años. El sindicalista había argumentado que la inclusión obligatoria de la propina en las facturas de los clientes podría contribuir significativamente a la mejora de los salarios del personal de bares, restaurantes y hoteles. Barrionuevo sugirió que la propina obligatoria debería representar un porcentaje del total de la cuenta, proponiendo cifras que oscilan entre el 14% y el 18%, dependiendo del nivel y categoría del establecimiento.

La propuesta de Barrionuevo no es nueva; en diversas partes del mundo, es común que las propinas se incluyan automáticamente en las facturas de los clientes. Esta práctica asegura una distribución equitativa y constante de las propinas entre el personal, mejorando así su ingreso mensual y estabilidad financiera. En Argentina, la implementación de esta medida busca replicar esos beneficios y adaptarse a un estándar internacional que promueve la equidad y la justicia laboral en el sector gastronómico.

Inclusión de las propinas en las facturas de pago: un viejo pedido de Luis Barrionuevo

La inclusión de las propinas en las facturas de pago es un viejo pedido de Luis Barrionuevo

El impacto de esta medida se extiende más allá de los empleados, afectando también a los dueños de restaurantes y bares, quienes deberán ajustar sus sistemas de facturación y posiblemente reconfigurar sus modelos de negocio para cumplir con la nueva regulación. La formalización de las propinas en las facturas podría llevar a un incremento en los costos operativos y administrativos, obligando a los empresarios a evaluar sus estrategias comerciales y de precios.

Por otra parte, los consumidores también jugarán un rol crucial en la implementación de esta medida. Al tener la propina integrada en la factura, los clientes deberán adaptarse a esta nueva práctica, que hasta ahora ha sido opcional y basada en su discreción y satisfacción con el servicio recibido. Esta obligatoriedad podría modificar las expectativas y experiencias de los clientes al visitar establecimientos gastronómicos.

La medida de incluir las propinas en las facturas representa un cambio significativo en la regulación del sector gastronómico, con implicaciones tanto para los empleados como para los empleadores y consumidores. La normativa busca formalizar una práctica que, hasta ahora, ha sido voluntaria, y asegurar que los trabajadores reciban un ingreso justo y predecible.

Los próximos pasos incluyen la firma del decreto por parte del presidente Javier Milei y la implementación gradual de la medida, que requerirá ajustes en los sistemas de facturación y en los convenios laborales. Los gremios deberán trabajar conjuntamente con los empleadores para asegurar una transición fluida y justa hacia este nuevo modelo.

Qué promociones preparan los gastronómicos para el Día del Amigo

Fuente: Cronista – Respecto a la proyección de la demanda de comidas, el informe destacó que el 35% de los consultados elegirá asado, el 29% optará por pizza para el almuerzo o cena, y un 22%, picada

En este último caso, una picada en la que comen dos y pican cinco, tiene un valor de $ 32.340 en bares y restaurantes de la Ciudad de Buenos Aires, donde se realizó el relevamiento. Si se compara el precio actual con el del año pasado, arroja una suba interanual del 233%. En el caso del sushi, hay ofertas de 40 piezas por $ 19.999. El año pasado, esta misma opción valía alrededor de $ 7000, lo que significa un alza del 190% respecto a 2023.

Para aquellos que deseen festejar por la tarde-noche, hay promociones hasta las 20:30 hrs, como, por ejemplo, papas o pizza margarita, más dos pintas, a $ 13.500 y $ 13.600, respectivamente. En el caso de bar o boliche, existe una opción de recorrido por tres bares que incluye pizza, barra libre por $ 25.000 por persona.

En la previa al día de la amistad, los comerciantes lanzan ofertas y descuentos para dinamizar las ventas en un contexto de caída de la demanda. Cuál será el menú más accesible en 2024 para festejar con amigos y qué promociones hay

 En la previa al Día del Amigo, que se celebra todos los años el 20 de julio, cinco de cada 10 comercios argentinos tienen buenas expectativas de ventas, según un estudio que realizó la consultora Focus Market en base a datos de Fecoba (Federación de Comercio e Industria) y la plataforma de movilidad DiDi.

Día del amigo: con precios hasta 230% más caros, comercios lanzan descuentos para regalos y reuniones

Sin embargo, ante la caída de la demanda minorista y con precios que, en algunos casos, son 230% más altos que el año pasado, los dueños de los locales lanzan promociones, ofertas y descuentos para dinamizar aún más sus ventas.

Según la encuesta de la Fecoba,  cuatro de cada 10 (37%) comerciantes cree que las ventas no sufrirán cambios por los festejos, en tanto un 29% piensa que bajarán: un 16% prevé que tendrán «una leve caída«, mientras que un 13% calcula que «caerán notablemente«. El 21% estima que tendrán un leve aumento, mientras que, sólo un 3% asegura que «subirán notablemente«.

«En el sector gastronómico se intentan adelantar reservas en un contexto de disminución de las ventas, que, en promedio, ronda el 20% en el acumulado del año. De acuerdo con Fecoba el 50% de los comercios Pymes tiene una expectativa positiva para el nivel de ventas para esta festividad. La proyección de gasto promedio es $ 20.770 por persona incluyendo el encuentro y eventual regalo»,detalló Damián Di Pace, director de la consultora.

Dado que las juntadas por el día de la amistad comienzan en los días previos al 20 de julio y continúan los días posteriores, esta fecha implica, para las pymes del sector, uno de los movimientos económicos más importantes del año en el sector de gastronomía, ocio, entretenimiento y servicios de movilidad, entre otros.

En ese sentido, según DiDi, es uno de los eventos que más mueve a los argentinos en el año. Por las mayores salidas de esparcimiento -tendencia que en la celebración pasada ya se observó-, el 20 de julio pasado, que cayó jueves, registró hasta un 23% más de demanda comparado a un día común. A su vez, hubo picos entre las 22/23hs del 58%, mientras que la mayor solicitud de coches fue a la 1am, con un incremento de 250%, versus ese mismo día de la semana previa y posterior, pero sin la demanda estacional del Día del Amigo.

Entonces, teniendo en cuenta la caída de las ventas minoristas y, sobre todo, que la mayor parte de los argentinos consultados (30%) elegirá, para este día, comprar su cena o almuerzo en un local de ventas de alimentos o supermercado y cocina en casa, el sector gastronómico lanzó promociones y descuentos para suavizar el impacto sobre sus negocios.

La demanda sobre la industria gastronómica estará dividida, según el relevamiento. Si bien la mayoría de los consultados hará un ‘plan casero’, otros, irán a una pizzería (24%). Un 16% elegirá un bar, otro 12% un restaurante.

El paso a paso para abrir un restaurante exitoso

Fuente: Ámbito – Diferenciarse entre la gran oferta gastronómica siempre implica un desafío. Contar con una cocina de vanguardia basada en productos de cercanía que haga a la identidad del destino, es una de las recomendaciones a seguir, para quienes buscan montar un restaurante de entre 40 y 50 cubiertos.

Abrir un restaurante conlleva una serie de pasos a seguir para que la experiencia no solo sea más simple, sino también rentable y sostenible en el tiempo. Luciano Nanni, coordinador del Torneo Federal de Chefs de FEHGRA, que tiene su Gran Final en HOTELGA 2024, recomienda crear un proyecto atractivo, que conecte al visitante con la cultura regional, con productos de cercanía para diferenciarse y atraer a un público específico.

¿Cómo elegir la ubicación y el local?

Para empezar, buscaría un lugar que no sea excesivamente transitado, pero de fácil acceso. Una opción interesante podría ser una zona típica, clásica u olvidada de la ciudad para poner en valor. Optar por una casona antigua, que tenga su propia historia, puede añadir un valor significativo al proyecto. Esto no solo aporta un atractivo estético, sino que también ofrece una narrativa que puede ser utilizada en la estrategia de marketing y en la creación de una experiencia única para los clientes.

¿Cuáles son las principales variables a considerar para alcanzar la rentabilidad?

Creo que es esencial tener un proyecto atractivo que cuente con una historia fuerte y una conexión con la cultura regional. Esto ayuda a diferenciar el restaurante y atraer a un público específico. Segundo, utilizar productos de cercanía es fundamental, porque ofrecen mejor calidad, al menor costo, además de colaborar con la experiencia del visitante. Por último, aplicar tecnología avanzada en la producción puede reducir costos operativos, mejorar la calidad del servicio y aumentar la eficiencia, por eso es valioso estar al día con las novedades en equipos de cocina y software de gestión.

¿Cuánto influye la ambientación y qué presupuesto debería destinarse a ella?

La ambientación de un restaurante es uno de los elementos más importantes porque hace a la experiencia memorable del comensal. La decoración y el diseño interior influyen significativamente en la percepción y satisfacción desde el momento en que entra al local. Recomendaría destinar entre un 35% y 40% del presupuesto total a la ambientación, aunque esta cifra puede variar según el espacio que se vaya a intervenir.

¿Cómo se determina el público objetivo de un restaurante de este tipo?

Debería estar pensado para atraer a personas a partir de los 30 años que valoran la cultura y la identidad de la región o ciudad y que aprecien la alta cocina y la calidad de los productos de cercanía. Es importante definir claramente este perfil, para orientar todas las decisiones del negocio, desde el menú y la ambientación hasta las estrategias de marketing y comunicación.

¿Qué estrategias y programas de sustentabilidad se pueden implementar?

Implementar estrategias y participar en programas de certificación puede ayudarte a montar un local que no solo atraiga a los amantes de la buena comida, sino también a aquellos que valoran la sostenibilidad y el impacto positivo en la comunidad.

Tenés las Certificaciones de Productos Orgánicos, que garantizan el cumplimiento de los estándares orgánicos, reforzando el compromiso del restaurante con la salud y el medio ambiente. La Certificación Sistema B, para empresas que cumplen con altos estándares de desempeño social y ambiental, responsabilidad y transparencia.

Otra estrategia es la participación en ferias y mercados locales para promover la cocina regional y conectar directamente con la comunidad. Capacitar al personal en prácticas sostenibles y en la importancia de la cocina regional o realizar campañas de sensibilización para los clientes, mediante señalización, menús y eventos especiales.

¿Cómo se eligen las maquinarias y el equipamiento?

El equipamiento lo va a definir nuestra propuesta gastronómica, la sugerencia siempre es que se apoye en tecnología de última generación la cual nos va a reducir el costo y aumentar la eficiencia. Y no solo es la maquinaria en la cocina, también los sistemas de gestión de pedidos ayudan a organizar y reducen los tiempos de espera. Estas inversiones pueden parecer altas inicialmente, pero se amortizan rápido con la reducción de desperdicios y el aumento de la productividad.

¿Cómo se selecciona el personal, propio o con agencia?

Es importante tener claro el organigrama del negocio y las tareas específicas asignadas a cada perfil antes de comenzar la búsqueda de personal. En el caso de no tener mucha experiencia en selección, recomiendo apoyarse en agencias especializadas.

¿Cómo y en qué se puede aplicar la tecnología y la IA en un restaurante?

La tecnología y la inteligencia artificial pueden transformar la operación de un restaurante en múltiples niveles, como la gestión de stocks, que monitorean y gestionan los inventarios en tiempo real; la automatización de pedidos, herramientas que permiten a los clientes hacer pedidos directamente desde sus teléfonos.

Después te puede ayudar con la personalización de la experiencia del cliente, para analizar las preferencias del público objetivo y ofrecer recomendaciones de menú adaptadas, por ejemplo, los programas de fidelización, publicidad dirigida, entre otros usos.

Otras aplicaciones son la optimización de la cocina, con equipos inteligentes que pueden ser programados y monitorean una cocción precisa. Los sistemas de gestión de pedidos. Sistemas de monitoreo para la seguridad de las instalaciones y la protección de clientes y personal. Sistemas de monitoreo para los ingredientes, que miden la temperatura y las condiciones de almacenamiento, trazabilidad de ingrediente, y mucho más.

¿En cuánto tiempo se amortiza la inversión en un restaurante de este tipo?

Determinar el tiempo de amortización de la inversión puede ser complicado, depende de múltiples factores como la ubicación, el tamaño del restaurante, la eficiencia operativa y la demanda del mercado. Un restaurante bien gestionado puede esperar amortizar su inversión inicial en un periodo de 3 a 5 años.

¿Cuáles son los gastos de habilitación?

Los gastos generales de habilitación y funcionamiento pueden variar significativamente dependiendo de la jurisdicción y el tipo de instalaciones.

¿En cuánto tiempo puede comenzar a funcionar un restaurante una vez iniciada la planificación?

El tiempo necesario para que un restaurante comience a funcionar puede variar ampliamente según la magnitud del proyecto. Para un restaurante de 40/50 cubiertos, el proceso puede tomar alrededor de 6 meses, considerando todas las etapas de planificación, renovación del local, obtención de permisos, contratación y capacitación del personal, y marketing previo a la apertura. Para poner en marcha el negocio en un plazo más corto, el diseño del proyecto debe ser sencillo. Seguir el paso a paso ayuda a que los tiempos se acorten y se agilice el proceso.

Hotelga 2024 llega con novedades: Descuentos en Vuelos y Hoteles y Acreditaciones online

Fuente: FEHGRA – FEHGRA y AHT acercan descuentos en hoteles y aéreos para que los visitantes a Hotelga. Además, ya es posible acreditarse. La exposición se llevará a cabo del 28 al 30 de agosto en La Rural Predio Ferial de Buenos Aires, y la entrada es gratuita.

Vuelos

Hasta un 10% de Descuento, según la ciudad de procedencia.

• Ingresar a: aerolineas.com.ar/es-ar/congresos/calendario

• Seleccionar el evento dentro del área de Organismos Institucionales y Afines

• Ingresar el Código del evento: HOT89 para recibir el descuento

Condiciones de los descuentos

No válido para vuelos con otras compañías ni rutas en código compartido. Rigen las condiciones de la regulación tarifaria vigente y correspondiente a la tarifa emitida. El descuento solo se realiza sobre la tarifa, el pasajero abonará a los demás cargos e impuestos al momento de la emisión. Válido para participante y un acompañante adulto.

Validez de viaje entre 23/8/2024 al 4/9/2024 para la ciudad de Buenos Aires.

Aerolíneas Argentinas como transportador oficial no es responsable de la organización, ejecución o de cualquier otra actividad relacionada con el EVENTO.

Descuentos en hoteles

Es posible obtener descuentos en una amplia selección de hoteles pertenecientes a FEHGRA y la AHT. Estas ofertas son por tiempo limitado.

Listado de hoteles

Abasto Hotel – Abasto Hotel Buenos Aires – Amerian Buenos Aires Park – Arc Recoleta Hotel – Arenales Hotel – Argenta Tower Hotel – Atlas Tower Hotel – Blanro Hotel – Boutique Apartments BA – Boutique Suites Palermo – Camaro Palace Hotel – Dazzler by Wyndham Buenos Aires Polo – Dazzler Maipú Wyndham Hotels & Resorts – Dazzler San Martín by Wyndham Buenos Aires – Design Suites Buenos Aires – Dolmen Buenos Aires Hotel – Dorá Hotel Buenos Aires – Efe Hotel & Cowork – Eurobuilding Hotel Boutique Buenos Aires – Feel Buenos Aires Apartments – Feir’s Park Hotel & Rooftop – Finisterra Hotel Boutique – Gran Hotel Ailén – Gran Hotel Argentino – Hotel Carsson – Hotel Cyan de las Américas – Hotel Dos Mundos – Hotel Embajador – Hotel Emperador Buenos Aires – Hotel Impala – Hotel Ker Urquiza – Hotel Pestana Buenos Aires – Hotel Sarum – Hotel Sheltown – Howard Johnson Plaza Buenos Aires Florida Street – HR esmeralda Luxor – HR Luxor – HR Plaza Luxor – Ibis Buenos Aires Obelisco – Ibis Obelisco Bs. As. – Ker Belgrano Hotel – Ker San Telmo – Konke Buenos Aires – Libertador Hotel – Loi Suites Recoleta – Lois Suites Esmeralda – Merit San Telmo – Mine Hotel Boutique – NH 9 de Julio – NH City – Patios de San Telmo – Principado Downtown Buenos Aires – Regente Palace Hotel – Rochester – Rochester Concept – Sarmiento Palace Hotel – Savoy Hotel Buenos Aires – Two Hotel Buenos Aires – Up América Plaza – Up Congreso Hotel – Up Recoleta Hotel – Up Viamonte.

Acreditación

Ya es posible reservar el lugar en Hotelga, evento destinado a personas vinculadas al sector: hotelero, gastronómico y turístico. El ingreso es sin cargo. Para ingresar al predio se debe presentar tu documento de identidad. Los organizadores se reservan el derecho de admisión y permanencia.

Información: www.hotelga.com.ar