El diputado nacional Guillermo Montenegro abrió esta mañana el ciclo de entrevistas cortas de LU6 Radio Atlántica con los precandidatos a intendente de General Pueyrredon y en ese contexto planteó algunas soluciones para diversos problemas que expone la ciudad, como la falta de empleo, las falencias en el Puerto y el cordón frutihortícola y el mal estado de las calles.
El precandidato a jefe comunal de Juntos por el Cambio, que se encamina a disputar una interna con la lista de Vilma Baragiola en las PASO del domingo 11 de agosto, está casado y es padre de cinco hijos, de 19, 20 y 26 años, junto a “los mellis”, que nacieron hace cuatro meses.
En el ciclo “Conociendo al candidato”, Montenegro contó que no tiene propiedades a su nombre, que es inquilino, maneja un Megane modelo 2009 y que el PRO es el único partido al que se ha afiliado. Además, respondió a preguntas de los vecinos al salir a la calle.
“Antes no estuve afiliado a otro partido. No me dediqué a la política hasta el 2007. Era juez federal. Al margen de no tener participación, hay prohibición expresa de ser afiliado a un partido estando en el poder Judicial. A mediados del 2008 me afilié al PRO”, contó.
Montenegro tiene 56 años, nació en Mar del Plata y cursó sus estudios en Buenos Aires. “Entré a Tribunales sirviendo café y cosiendo expedientes. La vida me obligó a quedarme donde tenía trabajo”, dijo el exjuez fiscal y juez federal al hablar de su progreso dentro del Poder Judicial hasta que “Mauricio Macri, María Eugenia Vidal y Gabriela Michetti me ofrecieron ser ministro de Seguridad por el perfil técnico que quedarían darle a la creación de la policía”.
Guillermo Montenegro abrió el ciclo de entrevistas “Conociendo al candidato” en LU6 Radio Atlántica.
Tras el cierre de listas y en plena campaña rumbo a las PASO, el precandidato a intendente aseguró hoy que su mayor aspiración es “transformar Mar del Plata”, aprovechando “la potencialidad maravillosa de nuestra ciudad desde lo turístico, lo frutihortícola, la pesca, lo industrial y la tecnología”.
A su entender, Mar del Plata “creció mucho” pero “en forma desmedida” y planteó: “Quiero que haya más empleo, que la pavimentación sea otra cosa, que recibamos bien a la gente, ver transformada la Peatonal y la Rambla, pero también el barrio Belgrano, el Belisario Roldán, el San Jorge, el Centenario. La clave está en querer hacerlo”.
“Mar del Plata está sobrepensada con el plan estratégico, con el plan maestro de transporte y tránsito; ya sabemos lo que hay que hacer, pero hay que hacerlo. Ya está el diagnóstico, hay que hacerlo rápido para modificar realidad. Hay que empezar con pavimentación, la iluminación y espacio público, que se traduce en seguridad”, dijo.
En materia de empleo, dijo: “Es un problema, porque siempre estamos primeros o segundos en el ranking nacional de desempleo. Desde lo local tenemos que hacer que las habilitaciones sean mucho más rápidas y que si hay que abrir un negocio de dos personas o una industria de 300, sea fácil hacerlo y hoy no lo es”.
Asimismo, aseguró que en el Puerto “hay que hacer todas las modificaciones legislativas nacionales y provinciales necesarias para mejorar el trabajo en tierra”, mientras que en el cordón frutihortócola “debemos mejorar los caminos para que pueda salir la producción” y entonces “a raíz de una integración entre estos sectores, tenemos todas las posibilidades de transformar a Mar del Plata en la capital gastronómica de Latinoamérica; tenemos la experiencia para poder hacerlo”, sostuvo.
“Pensar a la ciudad como una provincia”
Guillermo Montenegro sostuvo “a Mar del Plata hay que pensarla como una provincia”, ya que “cuando uno ve las dimensiones de la ciudad, nos damos cuenta que requieren soluciones de gobierno, no solo de un intendente”.
“Debemos pensar en la industria, el empleo, el espacio público, pero también en cómo posicionamos a Mar del Plata afuera, con su industria textil y su impronta gastronómica”, dijo.
En esa misma perspectiva, el legislador y precandidato a intendente remarcó que “el secretario de Hacienda, más que enfocarse en pagar los sueldos, debería estar abocado a atraer créditos internacionales para que Mar del Plata esté en un lugar diferente”.
Plan de asfalto
Montenegro planteó que el mal estado generalizado de las calles de la ciudad configura una de las principales “preocupaciones” y “trabas” para los vecinos.
“Mar del Plata tiene 20.000 cuadras que si andás 24 horas en auto, 12 horas las haces en asfalto y 12 en tierra. De las primeras 12 horas, seis las haces con un mal asfalto, por eso que poner en marcha un plan de asfalto en forma urgente”, propuso.
Asimismo, destacó que “la mejora de las calles viene de la mano con los arreglos en el espacio público, las plazas y la iluminación” que “son cuestiones integrales que tiene que hacer el gobierno municipal” y que “están directamente ligadas a la seguridad, otro gran problema”.
“Macri es el capitán del equipo”
En otro pasaje de la entrevista, Guillermo Montenegro fue consultado por sus apreciaciones sobre tres figuras políticas, dos de ellas nacionales, como Mauricio Macri y Alberto Fernández, y una local, Vilma Baragiola.
Sobre el presidente de la Nación, dijo: “Es el que me convenció a dedicarme a la política. Es el capitán de un equipo que va más allá del gobierno. Es el director técnico. Es una persona muy dedicada al trabajo y al hacer”.
Con respecto al candidato a presidente y compañero de fórmula presidencial de Cristina Fernández de Kirchner, sostuvo: “A Alberto lo conocí en la facultad, él es más grande que yo, era ayudante de alumnos de una materia que cursé. No termino de entender la decisión que toma en este momento de ir con el kirchnerismo siendo él tan crítico del kirchnerismo. Yo me puse una remera amarilla el día que tomé la decisión de involucrarme en la vida política y nunca más me la saqué. Y el día que me la saque no me dedicaré más a la política. No voy a poder estar en otro lado. Esto tiene que ver con principios, valores, con respetar al otro”.
Por último, sobre su rival en la interna de Juntos por el Cambio, expresó: “Vilma es una dirigente con mucho trabajo de muchos años. Cuando era ministro ella vino al ministerio a trabajar algunas cuestiones de seguridad, y la ayudamos en el tema de las cámaras en Mar del Plata. Le tengo mucho respeto y mucho cariño”.
