La Fernetería, el primer bar & restaurante de amargos

Fuente: Glamout ~ Fernets nacionales e internacionales acompañan los típicos trapizzinos romanos para disfrutar entre amigos. La propuesta, cuenta también con un bar que ofrece tragos de autor realizados con fernet y bebidas típicas italianas, además de un restaurante a cargo de Rodrigo Sieiro.

Cortinas de terciopelo, cinco canillas de fernet, una imponente barra de mármol de más de 20 metros y un gran salón pensando en cada uno de sus detalles invitan al verdadero encuentro con amigos en La Fernetería Aperitivo y en La Fernetería Bar & Eatery.

Ubicada en pleno Palermo Soho, una de las primeras ferneterías de Buenos Aires atrae por su encanto italiano y su ambiente moderno. Al ingresar uno se encuentra con La Fernetería Aperitivo, en donde se pueden degustar en la barra entre cinco variedades de fernet combinados con cola, pomelo, tónica, jugo de naranja o soda.

Allí todas las combinaciones se pueden pedir según la graduación del fernet y el complemento que se desee: 30%/ 70% o 50%/ 50%. Los clásicos trapizzinos que se ofrecen para disfrutar al paso son perfectos para acompañar el aperitivo. Una propuesta singular y que se destaca en la calidad de su materia prima: mortadela con pistachos, polpette, berenjenas parmegianas, salame o jamón crudo y muzzarella, y fior de latte con pesto.

Con sólo atravesar las imponentes cortinas de terciopelo que lo separan, se descubre La Fernetería Bar & Eatery. Hace falta animarse a entrar para dejarse sorprender por un gran salón que mantiene intacta su estructura original y sus paredes que combinan diversas texturas como ladrillo, cemento y mosaicos. Lo rustico se fusiona armoniosamente con la modernidad de la imponente barra de mármol y la sofisticación de sus muebles. La coctelería del bar está a cargo de Mona Gallosi, Federico Cuco, Matías Merlo, Sebas Atienza y Gon Cabado. Propone tragos de autor realizados con fernet, además de cocktails clásicos, cervezas y la mejor variedad de bebidas italianas como brandys, amaros, vermuts y aperitivos.

Una gran mesada a la vista es el escenario perfecto para amasar las pastas en el momento utilizando la mejor sémola del país. Su chef, el reconocido Rodrigo Sieiro, ofrece una gastronomía variada, sutil y descontracturada, que traslada a las antiguas tradiciones italianas. Se pueden compartir grandes raciones entre amigos y disfrutar de largas conversaciones toda la noche junto a ellos.

Hay entradas como burrata, pulpo a las brasas, coliflor, berenjenas y ensaladas. La especialidad de la casa son las pastas variadas como los mafaldini con cordero especiado, los ravioles de topinambour, los agnolotti de ricota de oveja y los papardelles con hongos frescos. También hay platos como lasagna de bife de chorizo, pata de cordero y truchón entero con risotto de radicchio, todos cocinados a las brasas. Y de postre, para los más fanáticos, la propuesta más original: un helado casero de vainilla con syrop de fernet y especias.

Porque a buon intenditor, poche parole.

La Fernetería Aperitivo:
abierto de martes a sábado de 18 a 02hs
La Fernetería Bar & Eatery:
abierto martes y miércoles de 20 a 02hs, y jueves a sábado de 20 a 04hs.
www.laferneteria.com
@laferneteriabar
(5411) 3914-1972
Serrano 1349, Palermo Soho
Buenos Aires, Argentina

Erik Lorincz, el bartender que deslumbra al mundo visitó la ciudad de la furia

Fuente: Iprofesional ~ De la mano de Uptown y Nicky Harrison, dos de los mejores bares de la ciudad, deleitó a los porteños con un menú de cocktails exclusivo.

Su peinado hacia atrás con gomina, su traje que le calza perfecto y su imagen seria pero encantadora a la vez hacen que tranquilamente se lo pueda confundir con James Bond. Erik Lorincz es uno de los bartenders más famosos que, en pocos años, ha escalado hasta la cima del mundo de la cocktelería.

La Trabajó como jefe de barra del American Bar del hotel Savoy de Londres, lugar donde se crearon algunos de los tragos más famosos, y recientemente anunció su retiro para cumplir el sueño de todo bartender y abrir su propio bar en el centro de la capital inglesa. Invitado por Uptown y Nicky Harrison, llegó para deleitar con sus creaciones únicas e inigualables.

Su pasión por la cocktelería surgió poco después de terminar el colegio. “Quería hacer algo distinto, pero en ese momento era un gran riesgo ya que en Eslovaquia, donde nací, no había ningún bar”, me cuenta sentado en el piso superior de Uptown, donde se prepara para realizar un menú exclusivo de cocktails por la noche. Erik estudió hospitalidad, donde conoció lo básico, que fue suficiente para encender su pasión.

Cuando empezó la carrera, su profesor estaba haciendo consultoría para el primer cocktail bar de Bratislava, que le ofreció trabajar allí los fines de semana. “Estaba en el lugar indicado en el momento indicado”, señala. Mientras estudiaba la carrera, iba todos los fines de semana a perfeccionarse y cuando terminó sus estudios le ofrecieron un trabajo full time. “Mientras trabajaba allí pensaba en la buena decisión que había tomado, el mundo de la cocktelería es un ambiente sumamente energético, vibrante y siempre interesante. Nunca lo vi como un trabajo, siempre fue fascinante y satisfactorio”, agrega.

Después de haber adquirido todo el conocimiento posible, decidió viajar a Londres, una ciudad que describe como la capital de todo. Allí, el nivel era mucho más alto; trabajó en un club nocturno y luego en un restaurante japonés que despertó su curiosidad por la cultura y su atención al detalle. Fue así como llegó a conocerla en primera persona.

“La mayor parte de mi tiempo en Japón me lo pasaba sentado en los bares, observando a los bartenders, como mezclaban los tragos, como agarraban la cuchara y de ellos tomé la técnica que uso hasta hoy”, indica el profesional.

En cuanto a lo que distingue al bartending del resto de las profesiones, Lorincz destaca que los bartenders, además de producir un excelente producto, deben tener la habilidad de presentarse ante los consumidores. “La manera de usar los elementos es casi como ver un tango, una obra de arte que debe cautivar al espectador y eso es lo que nos diferencia, por ejemplo, de los cocineros que están detrás de escena”, aprecia.

Con respecto a la tendencia que hay en el mundo de la cockteleria, Erik señala que la clave está en utilizar técnicas muy avanzadas como la destilación, clarificación e infusión pero que, a la vez, el trago se vea limpio y sea agradable para los consumidores.

Ante la pregunta acerca de la escena local, me cuenta que considera que el nivel es muy bueno y ha progresado mucho en los últimos diez años. “Ocho años atrás era un problema hasta conseguir hielo de buena calidad. Tenía la receta perfecta y el hielo la arruinaba por completo. Los bares comenzaron a prestarle atención a ese y a otros detalles como la sofisticacion de la técnica y hoy en día el nivel de cocktelería que hay en Buenos Aires puede compararse con el resto del mundo”, manifiesta.

Lorincz entiende que hay muchos ingredientes de los que no disponemos en el país pero considera que estos límites nos hacen más creativos. “El bartender, al no disponer de una enorme variedad de ingredientes, debe ingeniárselas para utilizar lo que tiene y crear cosas novedosas con ellos. Un claro ejemplo es el mate, una bebida muy popular de la Argentina, que han sabido aprovechar para crear cocktails”

Frente a la imponente pared de botellas que iluminan Uptown, un bar que abrió en busca de traer Nueva York a la ciudad de la furia y lo logró de manera excepcional, se lo puede ver a Lorincz con un impecable traje blanco haciendo su magia y deleitando a todos aquellos que lo miran con admiración. Al día siguiente, hará lo mismo en Nicky Harrison, creado también por quienes idearon Uptown e inspirado en la época de la ley seca en Estados Unidos. Dos espacios que complementan a la perfección a un maestro como es Eric Lorincz.

Harán un mercado gastronómico en la Villa 31 para atraer visitantes al barrio

Fuente: ClarínComenzó a construirlo el Gobierno porteño en Perette y Walsh. Tendrá 30 locales y un patio de comidas.

En el marco de la obra de integración que la Ciudad lleva a cabo en las villas 31 y 31 Bis de Retiro, comenzó la construcción de un mercado gastronómico en uno de los ingresos principales al asentamiento.

En un galpón gigante, que durante muchos años fue ocupado por una empresa de colectivos de larga distancia, se construirán más de 30 locales, un patio de comidas y un horno comunitario, entre otras instalaciones. Se trata de una inversión de más de $ 46 millones. La inauguración está prevista para marzo de 2019
 
 La idea es que el 40% de la oferta del mercado esté provista por los vecinos. Muchos de ellos cuentan con una gran experiencia comercial: se estima que hay casi mil comercios en la villa y 250 puestos, en los que trabajan 350 personas.
 
 El mercado estará ubicado en la esquina de Perette y Walsh, a metros del supermercado Coto y en diagonal a la estación de ómnibus. Más allá de que la villa cuenta con al menos 40 mil habitantes, la idea es que convoque a vecinos de otros barrios, la gente que se mueve por la zona -viajando o trabajando- y a los más de 2.000 empleados que en un futuro se mudarán al Ministerio de Educación porteño, que ya comenzaron a construir en los terrenos que YPF vendió a la Ciudad.
 

El galpón donde construirán el mercado gastronómico de la Villa 31.

 La Ciudad busca, por un lado, replicar la experiencia de transformación que se lleva a cabo en otros mercados porteños. Y por el otro, dotar a esta comunidad de un espacio formal en donde poder desarrollar diferentes proyectos vinculados con lo gastronómico.
 
 Como sucede en Liniers, los puestos de verdura de la villa tienen especies de papines, ajíes o especias que no se encuentran en otros barrios de la Ciudad. En el lugar habrá también aulas en donde se dictarán talleres de oficios, habrá un aula cocina y otras dos aulas para la capacitación que ofrece el Programa de Ingreso a la Gastronomía (PIG).
 
 El corazón del mercado será un horno comunitario: la idea es que en torno a él se organicen charlas y talleres con reconocidos chef. El colectivo ACELGA (Asociación de Cocineros y Empresarios Ligados a la Gastronomía Argentina) participará en estas actividades.
 
 De a poco los mercados van ganando un espacio destacado en la identidad de la Ciudad. El Mercado de Belgrano, por ejemplo, fue renovado recientemente y según fuentes oficiales, multiplicó por diez su convocatoria. Los comerciantes tradicionales ahora conviven con propuestas gastronómicas muy atractivas. Algo similar ocurrirá en el Mercado San Nicolás (en Córdoba y Callao), que se encuentra en obra y que en los últimos tiempos estaba funcionando sólo con 8 puestos.
 La transformación del Mercado de Belgrano.
 
 La transformación del Mercado de Belgrano.
 
 “La gastronomía es un importante motor de la economía y un gran generador de empleo, por eso estamos potenciando los mercados gastronómicos barriales, revitalizando los que ya existen, como hicimos en el de Belgrano o estamos haciendo en San Nicolás. Y también creando nuevos mercados, como el que empezamos a construir en el Barrio 31”, sostuvo el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli.
 
 La apuesta más exclusiva será el Mercado de los Carruajes, en Alem 850, donde funcionaban las cocheras presidenciales. Allí un privado construye un paseo que apuesta a tener un 80% de locales de comida gourmet al paso.
 
 Volviendo al mercado de Retiro, a través de Participación Ciudadana se podrá elegir su nombre entre tres opciones: El Bocado, Mercado Porteño y Mercado del Barrio. Todo el emprendimiento está motorizado por el programa BA Gastronómica y la Subsecretaría de Inclusión Social y Urbana

 

Luis Morandi, curiosidades y anécdotas del primer wine bar porteño, que cumple 20 años

Fuente: Clarín ~ Gran Bar Danzón abrió en 1998 y fue el primero en servir vinos de alta gama por copa. Cómo sobrevivió a las modas y las crisis económicas.

Buenos Aires, 1998. El vino de mesa argentino, ése de las publicidades de los ‘80 que hoy muchos recuerdan con nostalgia, tiene los días contados. Todavía lo sirven en los restaurantes, lo sacan de algún estante donde lo guardan a temperatura ambiente, sea invierno o verano, y nadie se queja cuando lo descorchan así, ni pregunta qué varietal es (¿Malbec, Chardonnay? Basta saber si es tinto o blanco)

Pero la industria vitivinícola nacional está en pleno proceso de reconversión y hay un hombre que intuye lo que se viene, por eso se la juega con una propuesta gastronómica innovadora. Junto a su socia Patricia Scheuer, Luis Morandi abre Gran Bar Danzón en un primer piso de la calle Libertad, a metros de la Avenida Santa Fe. Una discreta puerta sin cartel con una escalera, en una cuadra residencial de Barrio Norte. Se presenta como el primer wine bar de la ciudad, el único que promete servir “vinos de calidad, y por copa”. Y, en los estertores de la década menemista, el Danzón -donde siempre hubo música, pero, curiosamente, nunca se bailó- se convierte en un éxito inmediato.

“Creo que salimos a la cancha en el momento oportuno. La industria estaba en plena transformación y la gente estaba preparada para el cambio”, rememora hoy Morandi en el mismo local al que ahora vienen los hijos de aquellos primeros clientes.

-Después los bares de vino se pusieron de moda y empezaron a abrir por todos los barrios. Como pasa ahora, con las cervecerías artesanales.

-Sí, hubo un momento en que cualquiera ponía un wine bar, supuestamente. Me acuerdo de haber visto el cartel de wine bar donde había una panadería, al lado de la bandeja de medialunas.

«Hubo un momento en el que cualquiera ponía un wine bar. Llegué a ver que servían vinos por copa en una panadería, al lado de la bandeja de las medialunas».
Luis Morandi, dueño de Gran Bar Danzón

Sonríe Morandi al recordar a todos los que quisieron subirse al boom y quedaron en el camino. Y destaca que el suyo no fue un proyecto improvisado ni un golpe de suerte. Él, que supo ser músico de la Filarmónica Nacional, comenzó a interesarse por la gastronomía a principios de la década del ‘90, cuando tomó clases de cocina con Dolli Irigoyen. Después, con el Zorrito Fabián Von Quintiero fundó el emblemático Soul Café, restaurante ícono de Las Cañitas.

“En el Soul yo ya había empezado a vender vino por copa, pero ahí no funcionó porque ese lugar tenía otro ADN. Era una cantina funk donde te caía Andrés Calamaro con diez personas más a la madrugada y a veces terminaban zapando ahí mismo. Fue una idea disparatada de dos delirantes”, dice.

-¿Por qué elegiste irte de Las Cañitas, que en ese momento era un circuito gastronómico en pleno apogeo?

La barra de Gran Bar Danzón, en Recoleta, tiene 12 metros de largo. Además de vinos, sirven coctelería de autor. (Foto: Marcelo Carroll).

-Yo tenía claro que buscaba un espacio por el centro, con otro perfil, otro ambiente. Y lo encontré en los clasificados de Clarín, mirá vos. Después hicimos un trabajo laborioso de ingeniería para construir un local adentro del otro, con vidrios dobles en las ventanas para lograr el aislamiento acústico y evitar quejas de los vecinos por el ruido. También se proyectó la barra de 12 metros, porque queríamos rescatar la buena coctelería, que en ese momento con tanta discoteca estaba caída.

-Conseguir vinos diferentes de lo que había en el mercado no era tan fácil entonces, ¿no?

-No, claro, era todo un trabajo. Ahora hay mucho para elegir, pero en ese momento no era sencillo traer las perlitas que nosotros teníamos, porque no tenían distribución comercial. A veces los enólogos nos mandaban por encomienda a Retiro los vinos que hacían en sus propias casas.

-Fuiste un cazatalentos, porque el Danzón fue un semillero de bartenders y sommeliers que ahora tienen nombre propio (Tato Giovannoni, Andrés Rosberg). ¿Cómo armaste el equipo?

-Nuestra manera de trabajar es darle espacio a aquél que tiene vocación de trabajo. Ellos crecieron porque tuvieron talento y dedicación.

-¿Cambió el público que viene al lugar en todos estos años?

-Se fue renovando. Tuvimos distintas épocas. Después de la tragedia de Cromagnon, con el cierre de muchas discos, notamos que venía un público que no era el habitual. ¡Veíamos pibes que se traían cervezas escondidas en la manga! Pero fue una etapa. Ahora tenemos clientes que no pagarían 4.000 pesos por una botella, pero sí son capaces de pagar 800 pesos por una copa súper premium.

«Con el que viene al bar se genera como un romance. A vos te puede empezar a gustar un vino antes de probarlo por la manera en que yo te hablo de él. Todos somos influenciables».
Luis Morandi, dueño de Gran Bar Danzón.  ~ Suscribir aquí para acceder a los beneficios de Info Gastronómica Premium!

Renovada oferta gastronómica en los arcos del Rosedal

Fuente: Clarín ~ El paseo que tuvo su apogeo en la década del 90 vuelve con todo. Bares y restaurantes de onda atraen visitantes de todos los barrios. En pleno barrio de Palermo, con los clásicos bosques y el lago de testigos, emblemas ambos del paisaje porteño, el ex Paseo de la Infanta se reinventa y luce más bello que nunca.

Actualmente hay diez locales bajo sus legendarios arcos, pero antes de la llegada de la primavera estarán todos los espacios completos, según anuncian allí mismo los carteles de los emprendedores a cargo de los proyectos pendientes

Comida sana, estilo americana, cócteles con estilo, helados top, hamburguesas, crepas, especialidades asiáticas, cafés gourmets, cervezas tiradas y delicias para la tarde son parte de la oferta actual.

Si bien cada propuesta tiene su público, los fines de semana el paseo se colma de visitantes, familias al mediodía que pasean al solcito y por las noches grupos de jóvenes atraídos por la música de los dj´s en vivo, tragos y buena onda. Mientras se espera el clima cálido, algunos arcos diseñaron sistemas de calefacción para los amantes del verde en toda época, incluso ofrecen ponchos para pasar una velada outdoor.

Como ven, hay para todos los gustos, las edades y los presupuestos. Y en el marco de una arquitectura bella que recrea viejos tiempos de la Ciudad, ahora renovados con ofertas gastronómicas diversas y tentadoras. Como para pasar un rato divertido y sentir la felicidad ahí cerquita, bajos los arcos del paisaje palermitano.
Hamburguesas en Williamsburg

Es un Burger bar que fue distinguido en 2017 como la mejor hamburguesa de la ciudad, en el concurso organizado por BA Capital Gastronómica. Su ambientación, a cargo del diseñador Horacio Gallo, combina armónicamente su estructura abovedada de ladrillos a la vista con madera, acero y azulejos, logrando la sensación de estar dentro de un diner norteamericano, pero con una estética moderna. Ofrecen variedades de hamburguesas gourmet, con ingredientes de calidad. Luminosa y con doble circulación, la cocina se ubica en el centro del local y se puede ver el proceso de elaboración.

Paletas heladas en Lucciano´s

La heladería marplatense sigue expandiéndose. Las bateas muestran paletas de llamativos colores y divertidas formas con personajes como los Minions , huellitas o simpáticos animalitos. También hay versiones “en palito” frutales y con sabores exóticos. Los clientes más clásicos pueden elegir la versión vasito, pote o cucurucho para disfrutarlos en un cómodo salón o comerlo paseando por el lago, a la vieja usanza.

Una de las mesas de afuera está rodeada por hamacas, ideal para deleitarse comiendo las cremas heladas mientras el cuerpo se distiende con el paisaje.

Tragos y frituras en Divisadero

El bartender Tato Giovannoni tiene el local más grande del paseo ya que ocupa dos arcos. Recordando su infancia en las arenas de Cariló y Pinamar, el espacio se divide en el sector “playa” con carpas y sombrillas alusivas, y la zona “bosque”, con árboles, sillas hechas con troncos y hamacas suspendidas. Impecables las frituras y la carta en general, donde se detacan los abundantes postres. Las cervezas y los cócteles tienen el sello de su creador. Uno de los arcos tiene una gran barra central donde los bartenders hacen su magia y, pasando por el túnel, se llega al otro arco-restó, con la cocina y el salón comedor. Buena onda y música que invitan a quedarse y pedirse otro trago.

Comida asiática en Komyun

Inspirado en Tokio y en los comics de Moebius, se trata de un nuevo espacio pensando para teletransportarte al país asiático con cada plato y trago. Una experiencia gastronómica donde se descubren colores, texturas y sabores del “corazón de Asia”, ofreciendo calidad y productos de estación. Tiraditos, ceviches, baos, piezas de sushi y platos principales son sólo algunos ítems de la carta nocturna. Al mediodía, un menú especial acotado. La barra propone gran variedad de whiskies (algunos japoneses), cócteles clásicos y más de 15 estilos de cervezas.
Variedades de cervezas en Avant Garden

Inspirados en los biergaten alemanes, ofrecen 12 estilos de cervezas tiradas (diez son artesanales). Es uno de los arcos elegidos por los jóvenes que se deleitan con música en un ambiente de jolgorio. Artistas invitados de miércoles a domingo, con ciclos y residencias, y cocina europea. Los platos más pedidos son Argentinien Burger (180 gramos de bife de chorizo), Schnitzel (milanesa de bife de chorizo, rúcula salvaje, tomates confitados, mayonesa de sriracha), tabla de fiambres, fish & chips, hummus, babaganoush y langostinos en panko.

Cocina de autor y pastelería en Mooi

Un ambiente elegante con música suave invita a tomar un cafecito con buena pastelería. El estilo de la cocina es “saludable”, pero con permitidos un tanto potentes: bondiola, salmón, ojo de bife, y también sándwiches especiales, interesantes ensaladas, jugos naturales y más. En ambos patios hay cómodos sillones y mesitas encantadoras. Ofrecen combos de desayunos y yogur natural en frasco. Los waffles son una especialidad de la casa y sesirven acompañados con frutas frescas y asadas, salsas de queso, dulce de leche o frutos rojos. El menú nocturno es más complejo y con toques gourmet.

Estilo americano en Rock & Ribs

Un auténtico smokehouse americano con un ahumador único en Sudamérica que puede cocinar mil setecientos kilos de carne en simultáneo. Las ribs son las estrellas de carta: muy carnosas y saborosas. Hay happy hours todos los días y para los noctámbulos, la cocina está abierta hasta las 3 am.

Si bien tiene dos salones cubiertos y mesas en el exterior, ofrece calentitos ponchos de lana y el servicio de “canasta”, para que los amantes de los picnics coman en el pasto. El nuevo salón, con techo automático, pantalla enorme y mesas comunitarias puede ser alquilado para eventos privados o cumpleaños.

Panqueques en Santa Crepa

Recientemente remodelado, el local que abrió hace tres años, ofrece crepes en 12 versiones dulces y 10 saladas entre las que se destacan el relleno de langostinos y el de lomo. Se las puede acompañar con smoothies (licuados cremosos), jugos naturales, tragos de autor y cinco variedad de cervezas tiradas. En la nueva carta figuran papas fritas belgas que prometen ser el boom de la temporada. Con el calorcito vendrán los shows musicales en vivo bajo el nombre de “Santa Sessions”. El salón, de madera clara, es muy espacioso. Por las noches la crepería se convierte en un bar, con música y cócteles.

Para los que se cuidan, Heallthy Planet

La parada obligada de los quieren una alimentación nutricionalmente correcta. Ofrecen cuatros estilos de ensaladas, cuatro variedades de sándwiches y dos opciones de wraps (uno apto es vegano) para almozar. Hay jugos naturales, trufas, granolas y entre la popuesta dulce, la vedette de la carta es la chocotorta fit: con menos calorías, hecha sin azúcar ni harina refinada y sin aceites. También hay tiramisú y budiones hechos con harina de almendras o de avena. Para comer dulces ricos sin culpa. Todos los productos se toman de las heladeras y se abonan en la caja. Hay mesas comunitarias.


Un café de sobremesa en Starbucks

La tienda tiene una capacidad interna para treinta y cuatro personas y externa para cincuenta y seis. Todos los viernes a las 10 de la mañana se realizan catas abiertas de café.

El local cuenta con una mesa de estudio con capacidad para siete personas. Desde allí se aprecia una vista al lago y al Rosedal. La oferta de café se extiende a distintas regiones de cultivo: Colombia, Guatemala, Kenya, Sumatra y Espresso Roast. También hay opciones de bebidas frías, calientes y alternativas. Y, por supuesto, los clásicos de la marca como caramel macchiato, cappuccino, café latte, iced vanilla latte, café mocha helado y americano. Suscribite a Info Gastronómica aquí

 

La transformación de la Avenida Callao: de los restaurantes históricos a los bares «trendy»

 Fuente: Clarín ~ De Congreso a Parque Thays, el recorrido incluye espacios centenarios y populares y otros que apuestan a la vanguardia y la sofisticación.

El lado «trendy» de Avenida Callao: el bartender Peter Van den Bossche está al frente de la barra de Henri, un concept store que incluye galería de arte, sushi y patisserie.

En el universo de las avenidas de Buenos Aires, Callao nunca será tan emblemática como la 9 de Julio o Corrientes, ni tan extensa como Libertador o Rivadavia, ni tan popular como Santa Fe. Tampoco tiene una identidad o una estética tan clara como la Avenida de Mayo, que en unas pocas cuadras conecta las dos plazas más convocantes de la historia del país, ubicadas frente a los epicentros del poder político. Callao va detrás de todas ellas en algún impreciso ranking de porteñidad, tal vez porque, a lo largo de sus casi 3 kilómetros refleja los contrastes y las contradicciones de los habitantes y visitantes de la ciudad...ver más

 

La estrategia de las cervecerías para sobrevivir los meses fríos

Fuente: La Nación ~ En el imaginario popular, el invierno es para un vino y platos de olla . Pocos piensan en cerveza cuando planean una noche fría. Pero con el avance de las cervecerías artesanales y la cultura tan fuerte que traen, esto ya empezó a cambiar. ¿Por qué sigue valiendo la pena visitar una cervecería cuando la temperatura baja de 15 grados?

«La gente está cambiando y la cerveza se toma en cualquier época del año.

Lo que cambia es que en los meses fríos, la gente sale menos y los estilos de cerveza que se toman son otros», explica Carolina Ochoa, socia propietaria del bar Desarmadero (Gorriti y Lavalleja). Y la estrategia se repite en varios locales: variedades con mayor cuerpo y graduación alcohólica como las Porter y las Stout.

El Galpón de Tacuara: una fábrica de San Fernando que ya tiene tres locales 2:18

En El Galpón de Tacuara (Malabia 1574), el socio y dueño Martín Gianella, cuenta que la estrategia incluye pensar variedades de estación. Tienen la Jim Morrison con una dosis del clásico Bourbon Americano «Jim Beam», la Vascolet con chocolate, la Porter que es una cerveza típica invernal, con agregado de café de Lab Tostadores y la Dubbel que es una cerveza de graduación alcohólica media y con sabor a frutas secas que es propia del frío.
Calefacción donde sea ...ver más

 

Dos argentinas abrirán el primer «bar de mate» en Nueva York

Fuente: La Nación ~ Entre cervecerías, vinerías y cafés del barrio de Williamsburg, Brookyln , abrirá el primer «bar de mate» en el mundo. Se trata de Porteñas, un emprendimiento de las argentinas Fernanda Tabares y Carmen Ferreyra que quiere conquistar el paladar estadounidense con la infusión argentina.

Ferreyra, curadora de arte, se mudó a Estados Unidos hace dos décadas en busca de oportunidades laborales.

Después de trabajar durante años en el ámbito de la cultura, quiso cambiar de rubro. Para eso, convocó a su amiga, la chef Fernanda Tabares, creadora del restaurante Raíces.

En las góndolas neoyorquinas ya existen gaseosas hechas a base de yerba , pero el ritual argentino de pasar el mate todavía no ingresó en el gusto estadounidense. Para cambiarlo, dice Ferreyra, hacía falta un lugar «con onda».....ver más

 

Martín Cabrales: «Veo meses difíciles para el consumo, pero soy optimista»

Fuente: Infobae ~ El vicepresidente y accionista de la empresa familiar marplatense habla de la coyuntura económica y de cómo se trasforma la industria y el consumo de café.

«Hay sectores afectados y cadenas de pagos complicadas. Las pymes, por ejemplo», le dice Martín Cabrales a Infobae.

El empresario, tercera generación y vicepresidente de la empresa que lleva su apellido y es sinónimo local de café, hace un repaso de la coyuntura económica y de los fuertes cambios, de consumo y estratégicos, que impactan el eje de su negocio. Además, habla de lo complicado que puede ser el traspaso generacional en empresas familiares y de los cambios en el sector cafetero.

«Veo meses difíciles para el consumo, pero soy optimista», asegura el empresario. En ese sentido, destaca que confía en que la administración de Mauricio Macri puede encauzar la economía.

– ¿Qué medidas habría que tomar para reducir esos impactos?  ...ver más

El Mercado de San Telmo renace como polo gourmet

Fuente: La Nación ~ La apertura de más de una decena de locales de diversas propuestas le dio una nueva vida al tradicional edificio de Bolívar y Carlos Calvo.

Fin de semana largo aunque lluvioso el del 9 de julio último en la ciudad de Buenos Aires, pero los planes turísticos de Gina Grossi y de su novio, Hernán, no se han aguado. A cubierto bajo los techos de chapa y vidrio levantados en 1897, la pareja rosarina disfruta de un paseo gourmet por el renovado Mercado de San Telmo.

«Es la primera vez que lo visito. Hernán había venido hace poco y me dijo que valía la pena conocerlo, y la verdad es que es muy pintoresco, con muchas opciones para comer y recorrer», dice Gina, de 29 años, que trabaja en una compañía de seguros en Rosario. «Comimos en uno de los bares, compramos frutos secos, también hicimos compras en la verdulería, compramos unas piedras energéticas (unas amatistas) y tomamos unas pintas de cerveza», relata....ver más