Conociendo los Proveedores del sector, el «Quienes Somos» de Cook Shop Bazar

Fuente: Guia Proveedores Gastronómicos ~ COOK SHOP está integramente dedicado a artículos de bazar tanto a nivel hogar como gastronómico. También contamos con elementos indispensables para repostería encontrando en todo un gran surtido, calidad y buen precio.

En COOK SHOP podés encontrar todo lo necesario para equipar tu cocina, debido a que contamos con modelos para hogar de buena calidad y modernos a la vez.

Si estás pensando instalar un restaurante encontrarás en COOK SHOP la totalidad de artículos necesarios para llevar a cabo tu proyecto, incluyendo desde vajilla, cubiertos, etc., hasta maquinarias.

Av. Jujuy 1248
C1228ABT – C.A.B.A.
Buenos Aires, Argentina

(011) 4942-3733
(011) 4942-3998

bazar@cookshop.com.ar

Lunes a Viernes de 9.30 a 18.30
Sabados de 9.30 a 13.00

Así funciona el restaurante con robots en lugar de mozos

Fuente: Clarin ~ Se trata de un proyecto del gigante chino del comercio por internet Alibaba para modernizar los servicios en China

En un restaurante futurista de Shanghái, un pequeño robot avanza hasta la mesa, levanta la tapa de plexiglás mostrando un plato de cangrejos y dice con voz mecánica «¡Buen provecho!».

En este restaurante, llamado Robot.He, los autómatas han sustituido a los mozos.

Primero, los clientes eligen en una pantalla qué tipo de mesa van a utilizar, y luego deben dirigirse a la ubicación que se les asigna.

La comida se elige de dos formas: o bien pasando por el supermercado Hema, donde se puede optar entre enviar la comida a casa o al restaurante, o desde la mesa, con una aplicación en el teléfono móvil.

Si se pasó por el supermercado, un brazo robot se ocupará de preparar el pedido para enviarlo a destino, y al cabo de unos minutos, unos pequeños robots del tamaño de un microondas llevarán la comida a la mesa.

El lugar tiene unas pistas por donde circulan los robots, que al llegar a la mesa abren la tapa y esperan que uno retire el plato.Brazos robot llevan el pedido de comida a los autómatas que los distribuyen a las mesas. (AFP)

El gusto por la novedad provoca largas colas de espera ante el restaurante. Ma Yiwen, de 33 años, ha acudido con una decena de compañeros de trabajo.

«A todos nos gusta comer y hemos venido en nuestro descanso para probar un buen almuerzo cerca de la oficina. La idea de un robot que sirve comida en nuestra mesa es muy innovadora y queríamos verlo por nosotros mismos», dice.

Ma Shenpeng va a Robot-He cada semana, atraída por los precios. «Normalmente, para dos o tres personas, una comida vale entre 300 y 400 yuanes [44-58 dólares], pero aquí sólo cuesta un poco más de 100 yuanes [14 dólares]».

La comida llega a la mesa lista para ser disfrutada. (AFP)

Bajar costos laborales
La idea detrás de Robot.He es que Alibaba quiere aumentar la eficacia del servicio y reducir los costos laborales.

«En Shanghái, un camarero cuesta hasta 10.000 yuanes mensuales [1.460 dólares]. Esto supone cientos de miles de yuanes al año. Y se necesitan dos equipos de camareros», explica Cao Haitao, jefe de producto en Alibaba, que ideó el robot-mozo.

«En cambio no se necesitan dos equipos de robots y están operativos cada día», asegura.

Los restaurantes Robot.He dependen de la cadena de supermercados semiautomatizados Hema —también propiedad de Alibaba— donde los clientes llenan sus canastas con una aplicación móvil y reciben sus compras en la caja gracias a una cinta transportadora o directamente en sus casas.

Según los expertos, el concepto es sobre todo una manera de presentar una nueva tecnología y no tanto un nuevo modelo de negocio, en un país donde el costo del trabajo es bastante bajo.

Los restaurantes son también un símbolo del uso desmesurado de las nuevas tecnologías en China, decidida en convertirse en líder de la inteligencia artificial.

Los pagos con teléfono móvil son muy frecuentes y sectores enteros del comercio de proximidad, desde farmacias hasta librerías, han dejado de tener cajas.

Una tendencia que crece
El gran rival de Alibaba, JD.com, también tiene previsto abrir antes de 2020 mil restaurantes con platos preparados y servidos por robots. Y al igual que Amazon en Estados Unidos, JD.com y otras empresas chinas se plantean entregar pedidos con drones.

Todas esas innovaciones podrían permitir limitar los costos en un momento en el que el comercio en línea empieza a estancarse en China, tras años de fuerte crecimiento.

«Antes, todo el mundo buscaba una expansión rápida. Pero el crecimiento terminó, y todo el mundo se centra en mejorar su funcionamiento», dice Jason Ding, experto del comercio chino en Bain & Company.

«Se trata de reducir los costos y mejorar el servicio. Esas tecnologías que recurren a máquinas automatizadas, bien utilizadas, pueden contribuir a ello», considera.

Pero, aunque los robots permiten ahorrar en personal, no lo sustituirán, considera Wang Hesheng, profesor de robótica en la universidad Jiaotong de Shanghái, ya que el costo de esos robots sigue siendo demasiado alto para que su uso se generalice.

A no ser que el valor de la mano de obra continúe creciendo, explica. «Si el costo del trabajo sigue aumentando, los robots lo compensarán».

Los Vinos Argentinos presentes en HOTELGA

Bodegas de Mendoza, Buenos Aires, Catamarca, Chubut, Córdoba, La Rioja, Neuquén, Río Negro, Salta, San Juan, San Luis y Tucumán estarán representadas con más de 100 etiquetas para descubrir en un espacio exclusivo.

Los vinos argentinos serán parte de los grandes protagonistas del Encuentro Anual de Hotelería y Gastronomía, donde se realizará la 5° Edición de “Vinos de Argentina”, la feria más federal del mundo del vino, con la presencia de 35 bodegas de 12 provincias, un espacio exclusivo de exposición, degustación y venta para vivir una verdadera experiencia de alta gama. Bodegas de Buenos Aires, Catamarca, Chubut, Córdoba, La Rioja, Mendoza, Neuquén, Río Negro, Salta, San Juan, San Luis y Tucumán estarán representadas con más de 100 etiquetas para descubrir. Los mejores vinos de todo el país darán el presente.

Un encuentro único para conocer todos los distintos que hacen de la hotelería y la gastronomía parte de los sectores más pujantes de nuestro país y el mundo.

HOTELGA 2018, con la organización de la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (FEHGRA), de Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina (AHT) y Ferias Argentinas S.A., espera a todos los referentes del sector para disfrutar de un Encuentro único del 29 al 31 de agosto en La Rural. Para más información www.hotelga.com.ar

Conociendo los Proveedores del sector, el «Quienes Somos» de Bazar Rosemblit

Fuente: Guía@Gastronómica ~ Hace mas de 60 años, venimos acompañando a nuestros clientes, muchos ya amigos, en este fantástico mundo de la gastronomía. Con la representación de las marcas más reconocidas a nivel nacional e internacional, supimos estar al lado de nuevos emprendedores, grandes cadenas hoteleras, y de todo aquel que quiera sumergirse en la gastronomía, armando una relación de confianza con más de 15.000 cuentas.

Con la tranquilidad con la que nos responde el mercado hotelero / gastronómico te agradecemos por elegirnos y te damos la bienvenida a nuestra mesa.

Av. Jujuy 1242, CABA
Teléfono: (11)4308-1823 / (11)4941-0733
Fax: (11)4941-5623
Email: info@bazarrosemblit.com.ar

Erik Lorincz, el bartender que deslumbra al mundo visitó la ciudad de la furia

Fuente: Iprofesional ~ De la mano de Uptown y Nicky Harrison, dos de los mejores bares de la ciudad, deleitó a los porteños con un menú de cocktails exclusivo.

Su peinado hacia atrás con gomina, su traje que le calza perfecto y su imagen seria pero encantadora a la vez hacen que tranquilamente se lo pueda confundir con James Bond. Erik Lorincz es uno de los bartenders más famosos que, en pocos años, ha escalado hasta la cima del mundo de la cocktelería.

La Trabajó como jefe de barra del American Bar del hotel Savoy de Londres, lugar donde se crearon algunos de los tragos más famosos, y recientemente anunció su retiro para cumplir el sueño de todo bartender y abrir su propio bar en el centro de la capital inglesa. Invitado por Uptown y Nicky Harrison, llegó para deleitar con sus creaciones únicas e inigualables.

Su pasión por la cocktelería surgió poco después de terminar el colegio. “Quería hacer algo distinto, pero en ese momento era un gran riesgo ya que en Eslovaquia, donde nací, no había ningún bar”, me cuenta sentado en el piso superior de Uptown, donde se prepara para realizar un menú exclusivo de cocktails por la noche. Erik estudió hospitalidad, donde conoció lo básico, que fue suficiente para encender su pasión.

Cuando empezó la carrera, su profesor estaba haciendo consultoría para el primer cocktail bar de Bratislava, que le ofreció trabajar allí los fines de semana. “Estaba en el lugar indicado en el momento indicado”, señala. Mientras estudiaba la carrera, iba todos los fines de semana a perfeccionarse y cuando terminó sus estudios le ofrecieron un trabajo full time. “Mientras trabajaba allí pensaba en la buena decisión que había tomado, el mundo de la cocktelería es un ambiente sumamente energético, vibrante y siempre interesante. Nunca lo vi como un trabajo, siempre fue fascinante y satisfactorio”, agrega.

Después de haber adquirido todo el conocimiento posible, decidió viajar a Londres, una ciudad que describe como la capital de todo. Allí, el nivel era mucho más alto; trabajó en un club nocturno y luego en un restaurante japonés que despertó su curiosidad por la cultura y su atención al detalle. Fue así como llegó a conocerla en primera persona.

“La mayor parte de mi tiempo en Japón me lo pasaba sentado en los bares, observando a los bartenders, como mezclaban los tragos, como agarraban la cuchara y de ellos tomé la técnica que uso hasta hoy”, indica el profesional.

En cuanto a lo que distingue al bartending del resto de las profesiones, Lorincz destaca que los bartenders, además de producir un excelente producto, deben tener la habilidad de presentarse ante los consumidores. “La manera de usar los elementos es casi como ver un tango, una obra de arte que debe cautivar al espectador y eso es lo que nos diferencia, por ejemplo, de los cocineros que están detrás de escena”, aprecia.

Con respecto a la tendencia que hay en el mundo de la cockteleria, Erik señala que la clave está en utilizar técnicas muy avanzadas como la destilación, clarificación e infusión pero que, a la vez, el trago se vea limpio y sea agradable para los consumidores.

Ante la pregunta acerca de la escena local, me cuenta que considera que el nivel es muy bueno y ha progresado mucho en los últimos diez años. “Ocho años atrás era un problema hasta conseguir hielo de buena calidad. Tenía la receta perfecta y el hielo la arruinaba por completo. Los bares comenzaron a prestarle atención a ese y a otros detalles como la sofisticacion de la técnica y hoy en día el nivel de cocktelería que hay en Buenos Aires puede compararse con el resto del mundo”, manifiesta.

Lorincz entiende que hay muchos ingredientes de los que no disponemos en el país pero considera que estos límites nos hacen más creativos. “El bartender, al no disponer de una enorme variedad de ingredientes, debe ingeniárselas para utilizar lo que tiene y crear cosas novedosas con ellos. Un claro ejemplo es el mate, una bebida muy popular de la Argentina, que han sabido aprovechar para crear cocktails”

Frente a la imponente pared de botellas que iluminan Uptown, un bar que abrió en busca de traer Nueva York a la ciudad de la furia y lo logró de manera excepcional, se lo puede ver a Lorincz con un impecable traje blanco haciendo su magia y deleitando a todos aquellos que lo miran con admiración. Al día siguiente, hará lo mismo en Nicky Harrison, creado también por quienes idearon Uptown e inspirado en la época de la ley seca en Estados Unidos. Dos espacios que complementan a la perfección a un maestro como es Eric Lorincz.

Conociendo los Proveedores del sector, el «Quienes Somos» de Grupo E+D

 Somos un grupo asociado de empresas, cuya finalidad es atender proyectos en la industria de la hospitalidad, hotelería y gastronomía. En E&D Group nos distinguimos especialmente por ser fabricantes e importadores directos de cada uno de los rubros mencionados.

Contamos con una reconocida experiencia y prestigio en el mercado para jerarquizar sus proyectos. Cada negociación se realiza entre usted y cada una de nuestras empresas, brindándole un amplio asesoramiento sin sobre costos de comercialización. Nuestra razón de ser en E&D Group es ofrecer en un solo grupo, todas las soluciones demandadas, optimizando costos y dinamizando sus proyectos.

Domicilio: Ferre 6950
Localidad: Ciudad de Buenos Aires C.P.: 1639
Provincia: Buenos Aires
Pais: Argentina

Tel.:  54 11 61276251
Cel./Fax: 54 11 61276251
laura.alessandro@gmail.com  | http://www.equipamientoydecoracion.com/

 

Produce mostazas y especias en la Patagonia y facturará $26 millones este año

Fuente: La Nación ~ Juan Brennan entendió que vender mostazas fabricadas en la Patagonia solo iba a ser posible si las ofrecía con un diferencial, con un valor agregado que le compitiera a las industriales. Hoy, las mostazas a la pimienta o al estragón, en pequeños frascos de vidrio, se venden en todos los pequeños comercios, almacenes, supermercados y hasta en carnicerías boutique de todo el país. Y así lo hacen también las 11 variedades de especias Brennan, que se ofrecen dentro de una especie de tubo de ensayo.

«¿Cuál es el problema de este negocio?, pregunté cuando le compré la fábrica a la familia Wesley. Me contestaron: la Savora [la marca de Unilever] y los panchos. Todo el mundo cuando habla de mostaza piensa en Savora, que es como un genérico. Yo le digo a todo el mundo: para las salchichas, la Savora es lo mejor, incluso para mí. Esto es otra historia, ni mejor ni peor, es distinto», dice Brennan, fundador del emprendimiento patagónico que espera facturar $26 millones este año.
 
 No subestimar el packaging.
 
 Instalada la planta en el sur argentino, la marca ya no iba a poder competir en precio por el tema logístico y los altos costos que tiene el transporte en el país. Además, en cuanto a volumen, las mostazas tampoco lograrían ser competitivas por ese lado.
 
 Pero la Patagonia, si bien tiene su desventaja en la distancia, en lo que es marca tiene un encanto y un valor agregado por sí mismo. «Cuando se dice que es fabricado en la Patagonia suena bien, se ve como algo lindo y se supone que es de calidad y caro, aunque después no lo sea», explica el emprendedor de 67 años.
 
 Su diferencial, entonces, iba a ser la calidad, acompañada de una buena presentación. «Invierto mucho tiempo en encontrar el mejor packaging. No es casualidad de pegarla. Las mostazas las vendemos en frascos de vidrio, y las especias en lo que son las preformas (o PET) de las botellas de Coca-Cola, el estado anterior a cuando las inflan con aire y calor. Hasta tienen la misma tapa», revela Brennan.
 
 Entender cómo expandirse.
 
 Brennan compró la planta para producir mostazas en 1996, pero al tiempo se dio cuenta de que solamente con las cuatro variedades al estilo Dijon (la ciudad de Francia donde históricamente se producían los granos de mostaza negra), el negocio iba a tener un techo. «Las mostazas no crecían lo suficiente y pensé para mí: ‘Por este camino voy a terminar pidiendo trabajo en poco tiempo’. Ahí resolví comenzar a producir también especias», dice.
 
 Desde el mix de pimientas y cebolla en escamas hasta ají molido y pimentón dulce, todo se fabrica en la nueva planta recién inaugurada. Además están planificando producir nuevas líneas de productos, que serían otros aderezos.
 
 Producción y distribución.
 
 «La formula de las mostazas Dijon se corrigió según el paladar argentino, quienes las preferimos menos avinagradas, ácidas y no siempre tan picantes», cuenta Brennan. Las semillas amarillas y marrones son importadas de Canadá, que es el principal productor mundial.
 
 Mostaza y especias de la Patagonia Mostaza y especias de la Patagonia Crédito: Brennan
 
 El vinagre de vino blanco, en tanto, llega a Bariloche de Mendoza, y las especias de varias provincias, del Mercosur y del resto del mundo. «Mis hijos van gradualmente haciéndose cargo del negocio, algo que vivieron desde chicos cuando etiquetábamos en familia», dice.
 
 Barajar y dar de nuevo.
 
 Antes de fundar las mostazas, Brennan trabajó durante 22 años en la empresa familiar, donde fabricaban telas en San Juan. «Éramos industriales textiles, hacíamos sábanas principalmente. Pero en 1991 se abrió la economía y no pudimos competir con las importaciones, que eran productos mucho más baratos», cuenta.
 
 Quedó un tiempo desempleado hasta que decidió radicarse en Bariloche, donde al tiempo compró el know how y los equipos a la familia Wesley. «Era una miniplanta de 3×4, donde elaborábamos cuatro variantes de mostaza de grano para comercializar en la zona. Hacíamos unos 2000 frascos al mes, la producción actual de un solo día», recuerda.
 
 «Con la empresa textil no pudimos competir con las importaciones, pero, irónicamente, fue la apertura de la economía lo que permitió que se conocieran otros productos; en especial, aderezos nuevos, que fue un factor que nos ayudó. Antes era solo Savora y los panchos», concluye.
 Minibio
 
 Profesión: Estudió Administración de Empresas en la UADE, pero hizo varios cursos cortos. «Soy muy curioso», dice.
 
 Intuición: Después de trabajar 22 años en el rubro textil, las importaciones en la década del 90 hicieron cerrar el negocio. Brennan se mudó a Bariloche y compró la planta donde se hacían las mostazas en la zona ~ Suscribir aquí para acceder a los beneficios de Info Gastronómica Premium!

Conociendo los Proveedores del sector, Diafana #1 en fabricadoras de hielo

Presentes en el Stand 900 de Hotelga


Diafana es una empresa que se especializa en la fabricación, importación y comercialización de máquinas fabricadoras de hielo para la gastronomía y la industria.

Recientemente sumó a su portafolio de productos máquinas fabricadoras de hielo con cubos de tamaño mediano y grande, de 28 x 28 x 24 mm y 33 x 33 x 24 mm respectivamente. Son hielos con gran estética que realzan la apariencia de las copas conservando el sabor y las propiedades de la bebida.

Conversamos con el Ing. Hernán Fernández – Gerente Comercial de la empresa, quien nos brindó un breve adelanto de su participación en Hotelga 2018:

“Para este año tenemos grandes expectativas, esperamos que se repita el éxito de las ediciones anteriores y que se acerquen todos los referentes de la industria gastronómica del interior del país. Las ediciones anteriores fueron muy positivas para la empresa ya que logramos posicionar los productos y hacer nuevos vínculos comerciales.”

¿Qué novedades presentarán y qué encontrarán los profesionales que visiten su stand?

“Realizaremos el lanzamiento de las fabricadoras de hielo cubo mediano y grande, una novedad para el mercado, estamos hablando de máquinas de baja producción que arrancan en 45 kg/día y producen hielo cubo mediano de 28 x 28 x 24 mm. Además, presentaremos una fabricadora de hielo escamas de producción nacional, es un producto de excelente calidad exportable a toda la región.”

“Los profesionales de la gastronomía se encontrarán con la posibilidad de conocer las máquinas funcionando y ver el hielo que fabrican.”

Para contactar a esta empresa: Web: www.diafana.com.ar  Whatsapp: +54 9 11 2 530 1291

~ Suscribite aquí para acceder a los beneficios de Info Gastronómica Premium!

A los 13 fue voluntario para cocinarles a sus compañeros de escuela, hoy es el chef de un reconocido bar

Fuente: La Nación ~ Lejos está de la imagen del chef de películas que grita en la cocina. Por el contrario, Aldo Benegas vino de Misiones, conserva sus raíces del interior, se divierte, y sobre todo, ama lo que hace: la cocina es su vida, disfruta saborear y comprar cada ingrediente, confiesa que para inventar un plato nuevo tiene que tener hambre, porque es en ese momento que empieza a imaginar y mezclar en su paladar distintos sabores que forman la carta que se renueva cada tres meses en el Gran Bar Danzón, un clásico de la noche porteña. Sus comienzos.

A los 13 años la señora que cocinaba en su escuela se enfermó por 15 días. Entonces llegó la maestra y preguntó a sus alumnos, «¿quién se anima a cocinar?», y sin pensarlo Aldo levantó su mano: esos 60 alumnos del colegio serían los primeros comensales de su larga carrera como chef. «Me acuerdo que al principio no salió tan bien, pero después fue mejorando y me decían ´che, está mejor que la chica que cocina´. Teníamos una huerta al fondo de la escuela y retirábamos nuestras verduras de ahí, ese fue el comienzo», recuerda Aldo como si se contemplara a sí mismo en sus trece años.
 
 Reconoce también que su padre tuvo mucho que ver: era camionero, y cuando volvía a la casa le gustaba la buena cocina.
 
 Aldo empezó el colegio, hizo un año y no le gustó. Su padre le dijo que entonces debía trabajar, habló con un tío que tenía un restaurante en Bartolomé Mitre entre Paraná y Uruguay y a los 15 años vino a Buenos Aires a trabajar y a vivir con su tío en Claypole. Aldo cuenta que «los primeros días quería volver. Mi tío me mandaba a hacer los envíos y para mí era todo igual, yo miraba los edificios ¡y eran todos iguales! Recuerdo que una vez subí con todos los bolsos al ascensor lleno de gente, yo era el último en subir y no sabía que el último cerraba la puerta: todos se me quedaron mirando. De a poco fui aprendiendo cómo circular acá. En el restaurante de mi tío yo hacía la limpieza y ayudaba al cocinero; después el cocinero se hacía el pillo, y cuando él llegaba yo ya tenía todo resuelto».
 
 Trabajó durante dos años hasta que el restaurante cerró y él se fue a trabajar a la verdulería con su tía. Cuando cumplió 18 años, un conocido le consiguió trabajo en un restaurante de Puerto Madero donde empezó en el sector de limpieza, después como bachero, pero ya por entonces los cocineros le veían potencial. Aldo tenía la iniciativa de querer aprender, la curiosidad. Por ejemplo, cuenta que, al momento de lavar las sartenes, «sarteneaba» con agua para ver si le salía bien y practicar el salteado. «Una vez me dicen ´andá a buscar el berberecho´. Bajé a la cámara corriendo, miré todo y no sabía, así que subí todo lo que ví: mejillones, langostinos, todo. Y después volví a guardarlo. Así te vas curtiendo», dice entre risas el Chef.
 
 En ese mismo restaurante le ofrecieron el puesto de ayudante de parrilla con la tarea de dar vuelta los pescados; el parrillero le enseñó lo que era la carrera, luego renunció y Aldo tomó su puesto. «Los primeros días no podía dormir, me quedaba pensando y analizando cada plato. Era todo cantado, 300 cubiertos que entraban y salían, no es como ahora que entra la comanda y es más fácil. Yo tenía 21 años, aprendí el oficio y lo hice solo. A veces para poder llegar con todo le metía 16 horas seguidas».
 Su fugaz paso como camionero
 
 Una chica lo recomendó con Luis y Patricia, los dueños del Gran Bar Danzón. Arrancó trabajando en las entradas y de a poco fue creciendo. Trabajó durante tres años, pero le daba vueltas la idea de querer ser camionero como su papá, junto a quien había conocido Argentina, Chile, Uruguay, Brasil, y eso le gustaba. Entonces al cumplir 22 años volvió a Misiones, sacó el registro profesional y trabajó en aquello durante un año, pero en seguida se dio cuenta de que era un trabajo muy duro y sacrificado, y de que lo que le gustaba era cocinar. Volvió a Buenos Aires y Luis Morandi le ofreció trabajo como segundo de cocina en otro restaurante, hasta que entró al Danzón y en un año ya era el chef a cargo de la cocina. Hoy ya pasaron 13 años.
 
 Los secretos de su cocina
 
 «Lo importante es cómo pararte dentro de la cocina y cómo dirigir, no es fácil llevarlo todos los días; en la cocina tenés mucha presión, y para mantener al grupo en un momento de mucho trabajo hay que estar bien afilado, si no no formás equipo». Aldo Benegas, en su rol de Chef, es contundente cuando entrevista chicos, más allá de su currículum se fija cómo es la clase de persona, porque ve la cocina como un engranaje, «por ahí en una misma mesa piden sushi, un sándwich y dos platos principales; eso hay que coordinarlo, no podés entregar todo en diferente momento, y al tener distintas mesas de trabajo hay que coordinar todo. Necesitás un equipo, cuando estás frente a la cocina tenés que tener gente que te siga, que vos digas vamos para un lado y lo hagan. Uno ya sabe cómo quiere llevar la cocina», explica.
 
 No se describe como una persona que anda a los gritos dentro de la cocina sino que, por el contrario, todo es risas. Eso sí, siempre y cuando las cosas estén bajo control: «primero el trabajo y después la diversión. Tener gente que armonice con mi equipo es fundamental», sentencia.
 
 Dos veces por semana él mismo va al mercado central, ve los productos, los piensa y se mantiene al tanto de las novedades, admite lo mucho que disfruta hacer las compras. Cuando piensa los platos acepta las sugerencias de todos en la cocina, «así el mismo cocinero, cuando tiene que hacer ese plato, se siente parte de esto, porque no estás haciendo sólo algo que alguien te dijo sino que es parte de vos», recomienda.
 
 Cambia los platos de la carta cada tres meses según las estaciones del año. A veces, si un plato tiene buena rentabilidad, lo deja otra temporada. Pero el plato que se fue ya no vuelve. tal vez en algún detalle como la salsa, pero nada más. A su vez tienen eventos habituales, cada dos semanas un testing de 4 o 5 vinos para pensar qué plato acompañará a cada uno. Esto lo mantiene activo, hace que nunca se aburra de su trabajo y es lo que lo lleva a estar hace tantos años a cargo de la cocina del mismo restaurante.
 
 ¿Lo que más lo frustra? Que en nuestro país no entren productos nuevos: «al final terminás pensando mucho, porque tenés el ingrediente principal, que no lo podés cambiar, como por ejemplo el ojo de bife o el salmón que sabés que funciona. Tenemos ostras, pero si querés poner algo con centolla, mejillones frescos, almejas frescas, vas a conseguir una semana y después no te pueden prometer continuidad. Uno está limitado». Para él la clave es que la gente entienda lo que uno está comiendo, que cada ingrediente esté bien armado y que al juntarlo en un plato sea agradable al paladar, que lo disfrutes. «Ese es el concepto de mi plato, trabajar con los productos que tenemos acá, pero hacerlo bien, y tener productos frescos, algo de lo que me aseguro al ir yo mismo al mercado». Algo que parece comprender muy bien Toto, que desde hace 11 años asiste hasta tres o cuatro veces por semana. Se ubica al final de la barra, charla con todos y come o toma algo. Aldo lo describe como un comensal agradecido: «siempre agradece, me dice ´que bueno está esto´, ´impresionante´, come algo y está feliz».
 La cocina como parte de su vida
 
 Los sábados es su día franco y Aldo admite que no arranca el día hasta el momento en que comienza a cocinar, se declara un fanático de la cocina: «a dónde vas, tus amigos, la gente a la que uno quiere está esperando que le hagas algo. La cocina es eso, siempre vas a estar dando una parte tuya a tus amistades, a tus seres queridos, porque la cocina siempre está plantada en situaciones lindas, la comida es una necesidad y la cocina une, el charlar, el sentarse a la mesa, reúne. Por ejemplo, el viernes a la noche tenía ganas de comer ñoquis, y en una hora preparé todo para veinte, hice una focaccia, traje unos vinos y pensé «¿qué más se puede pedir?».
 
 Ese entusiasmo es el mismo que siente cuando «estrena carta», se planta cerca de la caja a mirar a los comensales, estudia sus gestos, cómo saborean la comida, y eso es una buena señal. De la misma manera que lo es cuando vuelven llenos los platos: «es una señal de alerta que hay que saber aceptar y corregir».
 
 El ingrediente principal: el factor humano
 
 Hoy, trece años después, confiesa: «Este lugar me ha formado en la carrera, mi gran maestro es el señor Luis Morandi que me dio la confianza, la guía. Yo desarrollo y tengo la idea de la carta, se la presento a Luis y él la mira un poco, ahí pasamos al costeo de los platos, y él siempre está con la vista en cada cosa. Así como la belleza de este lugar se la debemos a Pato», la socia de Luis.
 
 A sus 40 años reconoce que esa confianza que depositaron en él, nutrió su tarea y la toma de decisiones: desde hace ocho tiene en la cocina a Claudio Morales, un chico que vino de Corrientes y que, a pesar de su timidez, se fue haciendo un lugar. «Hoy en día es una persona que cocina todas las áreas, le enseñé también a hacer el pan, es un cocinero con todos los títulos. Es alguien que me conoce, que me entiende, y por eso siempre hacemos juntos los platos, porque hablamos el mismo idioma», se sincera Aldo, que encuentra en su compañero de trabajo lo mismo que en su momento otros vieron en él, algo que claramente representa su propia historia. Suscribite a Info Gastronómica aquí

Franquicias: pese a la caída del consumo, prevén un crecimiento del 10%

Fuente: Clarin ~ El rubro gastronómico, el que más crece: En 2018 superan el récord de las 1.000 empresas y aseguran que son capaces de crear 250.000 puestos de trabajo. Argentina es el principal exportador de franquicias en la región.

A pesar de la retracción del consumo y de la menor actividad económica, los comercios franquiciados aseguran tener suficientes recursos para hacer frente a la coyuntura. Esperan crecer alrededor de un 10%, este año, superando -por primera vez- el récord de las 1.000 empresas, capaces de crear unos 250.000 puestos de trabajo.

Sobre las ventajas del negocio, Susana Perrotta, presidenta de la Asociación Argentina de Franquicias, explica: “salís con un producto exitoso, con un requerimiento bajo de inversión y con oportunidad de comprar todos los insumos bajo una economía de escala, que termina impactando menos en los costos fijos respecto de los que tiene un negocio independiente”, enumera. ..ver más